Resumo do capítulo Capítulo 1037 de Castigado por su amor
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La persona indigente apartó un poco la mirada y luego asintió. "Sí".
La mujer también mostraba una expresión de simpatía en su rostro. "Es realmente lamentable que una mujer esté sin hogar y vagando por las calles. Hay tantas cosas en el mundo que son injustas para las mujeres".
Después de hacer una pequeña pausa, continuó: "Esa chica al principio era muy feliz. Escuché que se casó con el hombre más rico de Ciudad del Sur. Este es el vecindario más lujoso de Ciudad del Sur. La familia de tres estaba muy feliz, hasta que se toparon con este incidente".
La indigente volvió a preguntar: "¿Qué incidente?".
"Me enteré de que su hermanastra tiene uremia y necesita un trasplante de riñón. Quieren sus riñones, pero ella no está de acuerdo, e incluso los medios de comunicación han venido a buscarla. Dicen que no tiene conciencia y que se limita a ver desde lejos cómo alguien muere".
La indigente volvió a preguntar: "¿La chica que fue obligada a donar sus riñones se llama... Sabrina Scott?".
La conductora no se sorprendió por la pregunta. "Sí, mucha gente la conoce porque tiene un esposo poderoso. Sin embargo, frente a los medios de comunicación, por muy poderoso que sea, no tiene la oportunidad de ejercer su poder frente a ellos".
Cuando la mujer terminó de hablar, vio que la indigente ya no estaba junto a la puerta de su coche.
La indigente se había ido. La forma en que dobló su cuerpo y se encorvó hizo que la señora que conducía volviera a sentir simpatía.
La mujer volvió a suspirar y finalmente se marchó.
Por otro lado, los reporteros seguían obstaculizando la garita.
No se irían fácilmente.
En primer lugar, porque los asuntos relacionados con Sabrina y Sebastian serían de suma importancia para los medios. Aunque sabían lo despiadado que era Sebastian, el dinero era importante.
Todos querían tener una gran ganancia.
Además, sabían que contaban con el respaldo del Viejo Amo Shaw.
Uno de los reporteros tomó la iniciativa y habló primero: "No es de extrañar que el Viejo Amo Shaw dijera que esa tal Sabrina era muy hábil, y que tenía a los hombres de toda la alta sociedad de Ciudad del Sur en sus manos. Resultó tener muy pocos escrúpulos, ¿no?".
"Esto solo demostró aún más su falta de corazón, su desdén y sus intenciones crueles. Además, los rumores que merodean parecen no ser falsos. Una mujer que incluso usaría a su propia hija, por no hablar de usar a los demás".
"¡Sabrina, ven aquí!".
Los reporteros se volvieron más agresivos.
Incluso pronunciaban sus palabra como si fuera un crimen.
Incluso habían olvidado que su principal objetivo era el de presionar a Sabrina y chantajearla emocionalmente para que se viera atrapada entre la espada y la pared.
¡Poco a poco la estaban obligando a someterse a la presión y al final no le dejarían otra opción más que donar sus riñones bajo la exposición de los medios!
"Mi madre tiene fiebre y está muy débil", explicó pacientemente la niña a los reporteros con lágrimas en la cara.
En ese momento, una voz severa llegó de repente desde detrás de Aino: "Aino...".
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