Castigado por su amor romance Capítulo 1060

Jane se sobresaltó.

Volvió la cabeza y se encontró con la mujer.

La mujer aún llevaba puesto el mismo enterizo.

Sin embargo, su rostro estaba lleno de una expresión seductora.

La mujer ante sus ojos era naturalmente cautivadora. Sin embargo, sus ojos se llenaron de odio en cuanto vio a Jane. Ella parecía siniestra con su atractivo además de ser malvada.

Jane se sorprendió al principio. Luego, dijo con calma y gentileza: "Eres la prometida de Alex, ¿cierto?".

Lily dio un paso adelante, levantó la mano y golpeó a Jane en la cara. “¡Tú, una anciana que estuvo con mi esposo durante casi siete años! ¡Ya eres una abuela mayor y aún así estuviste con mi esposo! ¿Sabes por qué él no te quiere?”.

Jane levantó la mano para llevársela a la cara. Miró sorprendida a esa mujer seductora y dominante ante sus ojos.

Jane fue tratada con respeto en todos los lugares a los que había ido mientras estuvo con Alex. Nadie le había faltado nunca el respeto, y mucho menos le había dado una bofetada en la calle. Jane nunca golpearía a nadie, y tampoco los insultaría.

En ese momento, ella se quedó sorprendida por la bofetada.

Jane recordó el momento en que su cuñado la golpeó hace unos ocho años.

Ese tipo de miedo se apoderó al instante de todo su cuerpo. Ella miró a su alrededor, mientras sus labios hablaban con pánico: "Alex... Alex...".

"¿Todavía te atreves a mencionar el nombre de mi esposo?". Lily levantó la mano y quiso golpearla de nuevo.

Jane vio su intención, así que se dio la vuelta y empezó a correr.

Lo hizo muy rápido y se escondió de Lily en un pequeño callejón.

Sin embargo, era un callejón sin salida.

Cuando se dio la vuelta, Jane vio a dos hombres acercándose a ella por detrás.

“Ayuda…”. Ni siquiera pudo terminar de gritar cuando quedó inconsciente.

Cuando volvió en sí, Jane se dio cuenta de que había llegado la noche.

Le tomó un tiempo acostumbrarse a la oscuridad del lugar. Entonces se dio cuenta de que estaba en la cima de una montaña.

Un coche estaba estacionado frente a ella, y Lily estaba sentada dentro de él. Cuando se encendieron las luces del coche, Jane no tuvo dónde esconderse.

"¡Golpéala! No la mates. ¡Mantenla con vida!”. Siguiendo las órdenes de Lily, los dos hombres comenzaron a golpear y patear a Jane.