Castigado por su amor romance Capítulo 1139

En esta ocasión, la niña incluso se atrevió a golpear a un adulto, e incluso estaba dando órdenes a otros.

Pero, más importante aún, ¿por qué sus dos amigas estaban escuchando a la pequeña?

¡Dios mío!

En ese momento, Sabrina se quedó boquiabierta.

Con las cuatro mujeres forcejeando en el suelo, estaba claro que Lily era quien estaba perdiendo.

Nunca esperó que fuera a ser golpeada por una niña de seis años. Justo después de que su cabeza se estrellara y diera vueltas por haber golpeado el suelo, sus fosas nasales de repente tenían dedos metidos en ellas.

Fue realmente doloroso.

Quizas, demasiado.

Dolía tanto que Lily empezó a quejarse como un cordero. “Baa, baa”.

Ella estaba a punto de levantar las manos y golpear a la niña, pero sus manos fueron presionadas contra el suelo por dos mujeres.

Las dos mujeres incluso usaron sus pies, pisando sus manos con un pie cada una.

En toda Europa, e incluso en todo el mundo, había caminado por todas partes haciendo lo que le daba la gana incluso en bares de mala muerte como el de Europa. Sin embargo, aquí, en el lugar que ella llamaba su propio hogar, estaba siendo empujada al suelo por tres mujeres.

Las tres mujeres se habían unido para golpearla.

Al mismo tiempo, Aino presionó aún más sus dedos dentro de sus fosas nasales.

Atacar las fosas nasales era la técnica asesina de Aino.

Sus dos pequeños dedos habían llenado completamente la nariz de Lily como si fueran dos grandes tubos de trompeta. Incluso se parecía un poco a la nariz de un cerdo.

¡Auch!

Aino incluso comenzó a reír mientras forcejeaba.

“Mira lo fea que te ves. Eres tan fea, eres incluso más fea que los dedos de los pies de la Tía Jane. ¡Convertiré tus fosas nasales en trompetas ahora mismo!”.

“Ah… ¡Usaré todas mis fuerzas!”. Aino estaba usando toda la fuerza que tenía.

Quería hacer todo lo posible, así que usó su otro puño para presionar la barbilla de Lily y usarla como apoyo. Lily ni siquiera podía abrir la boca para hablar, e incluso se había mordido la lengua en el proceso.

“Ah…”, gritó Lily en agonía.

Su cabello, su rostro, sus orejas…