Castigado por su amor romance Capítulo 1145

Sus rasgos eran delgados y definidos, pero debajo de esos cálidos rasgos de su rostro se encontraba un hombre helado. Él era un hombre muy capaz, luchaba por mantener su trono como el jefe de Ciudad Kidon. ¡Lily Parker jamás le entregaría a un hombre tan maravilloso a otra mujer!

Los cuidadores ayudaron a Alex a subir al coche y Lily lo llevó de regreso a la casa de verano. Con la ayuda de los sirvientes, Lily ayudó a Alex a entrar en la casa y acostarlo en su cama. En ese momento, miró al hombre que había traído a casa.

Habló con un tono de lástima, como si se sintiera mal por sí misma. “¡Ahora es que puedes ver lo agradable que soy! Cuando estás borracho e inconsciente, ¡soy yo la mujer que está a tu lado! ¡Soy yo, y lo sabes! ¿Dónde está Jane? ¿Por qué no está aquí para cuidar de ti? ¡Levántate, date la vuelta, te quitaré los zapatos!". Lily volcó a Alex con movimientos bruscos y rápidos.

Alex dormía dulce y profundamente, pero no dejaba de murmurar: “Jane…Jane…Jane, ¿dónde estás? ¿Qué harás cuando te quedes sin dinero? Eres tan tonta, seguramente abusarán de ti en cuanto salgas de la casa. Jane, ¿por qué eres tan desobediente? Ya tienes un mes y medio afuera y todavía no quieres volver a casa... Jane, mujer estúpida, ¿cómo pudiste simplemente levantarte e irte? ¿Sabes que tu amiga... tu amiga Sabrina me cuestionó, me culpó, y me preguntó dónde estabas? ¿Qué se supone que le diga? Mujer estúpida, si tienes una amiga como Sabrina… No eres tan estúpida después de todo”.

Lily se enfureció. Un momento después, gritó con rabia: “¡Alex Poole! ¡PUEDES IRTE A LA M*ERDA!". ¡Con eso, se giró y salió de la habitación! Con una expresión furiosa, salió rápidamente por el patio y entró en su coche, alejándose tras una columna de humo.

Deambuló por la ciudad sin tener un rumbo real, estaba buscando por toda la ciudad. ¡Había decidido que, si veía a Jane, la mataría de inmediato! ¡Hace medio mes, en la cima de la montaña, no debió dejarla con vida! ¡Debió haberla empujado por el precipicio!

Lily condujo por las calles durante unas horas mientras buscaba a Jane. Sin embargo, el cielo se oscureció y aún no había rastro de ella.

Mientras bebía copa tras copa, no dejaba de regañar y maldecir a Jane todo el tiempo. “¡Esa maldita, Jane Sheen! ¡Tarde o temprano, te encontraré! No importa en qué rincón o grieta te escondas, ¡no puedes esconderte de mí! ¡Y tú, Sabrina Scott! ¡P*rra entrometida! Deberías arruinar tu propia ciudad, ¿por qué vienes a arruinar la mía? ¡Alex Poole me pertenece! ¡A mí! ¡Cualquier mujer que intente robarme a mi hombre no tiene otro futuro diferente de la muerte! ¡Sabrina, eres la que más merece morir! Maldita mujer, ¿crees que solo porque te casaste con Sebastian, puedes apoyar a Jane? ¡Te atreviste a ponerme las manos encima! ¡Muy bien! ¡Tarde o temprano, yo, Lily Parker, te mostraré lo cruel que puedo llegar a ser! ¡Sabrina Scott, maldita p*rra! ¡Ya verás!".

Lily continuó maldiciendo a Sabrina. Pues insultar a Jane no tenía sentido y era aburrido, ella era una mujer débil e indefensa. Pero Sabrina era diferente. Hoy fue la primera vez que se vieron y, sin embargo, Sabrina ya había reunido a tres o cuatro mujeres para golpearla hasta dejarla cubierta de moretones. ¿Cómo no iba a odiarla?

“¿Cómo te pudo perjudicar Sabrina? ¿Por qué la maldices de esa manera?". De repente, una voz de hombre ligeramente femenina habló con frialdad.