Castigado por su amor romance Capítulo 1616

Alex miró a Jane con anticipación escrita en todo su rostro. Él no estaba buscando comodidad o placer sensual. Solo quería que sus corazones se fusionaran a través del contacto piel con piel entre ellos. El mejor resultado sería poder volver a ser como eran en el pasado. Ella lo había amado entonces, y porque lo amaba, era feliz. Sin embargo, su corazón estaba entumecido ahora. Jane agachó la cabeza y no habló durante mucho tiempo.

Después de un largo rato, ella dijo en voz baja: “Lo siento, Alex. Yo… lo siento. Yo... realmente quería intentarlo y tenía muchas ganas de complacerte, pero yo... ya no puedo volver a ser como era antes".

Mientras decía eso, comenzó a llorar.

“No puedo olvidar todos los pequeños momentos que pasé junto a Noah. No puedo olvidar ese momento en que fui echada por ti. Ahora sé que también fue un pequeño desliz tuyo en ese entonces lo cual tuvo consecuencias tan graves. Me echaste en ese entonces porque no te diste cuenta de que en realidad estabas enamorado de mí. No podías distinguir claramente tus sentimientos”.

“Ya te he perdonado y no te culpo en absoluto. Realmente quería ser como solíamos ser como antes. Pero cuando recuerdo ese tipo de palizas violentas que he experimentado y que me han dejado al borde de la muerte, cuando me recuerdo desafiando el viento gélido mientras me agachaba sola fuera de tu mansión en medio de la noche, también cuando yo... me incliné a tus pies para recoger las sobras... Alex, simplemente no me atrevía a interesarme. Solo dame un poco más de tiempo, ¿de acuerdo? Es muy difícil para mí olvidar lo que he pasado en los últimos cuatro meses. Es muy duro. Lo siento".

Ella habló con el corazón apesadumbrado y fue muy apologética. Sin embargo, el corazón de Alex se sentía tan doloroso como si lo hubieran cortado a la mitad. Todo lo que ella había pasado no fue causado por sus intenciones, pero todo fue por culpa de él. La razón por la que ella estaba deprimida y desanimada tanto estaba estrechamente relacionada con él, entonces, ¿cómo podría forzarla?

Él la abrazó con fuerza en sus brazos, presionó sus cálidos labios contra su frente. “Lo siento, Jane. Lo siento. Ni siquiera será suficiente para mí compensarte con toda mi vida. Lo siento. Perdóname, ¿de acuerdo?”.

Al día siguiente, ellos se fueron al aeropuerto después de terminar de empacar. La anciana también los acompañó, quien tenía una enfermera especialmente dedicada para cuidarla. El hospital en la Ciudad del Sur también había sido contactado.

No solo eso, las personas de la Ciudad Sur ya habían acordado ir temprano al aeropuerto para darle la bienvenida a Jane. Mientras hablaban por teléfono, Jane sintió como si estuviera regresando a casa.

Después de vivir en la Ciudad Kidon durante casi ocho años, Jane nunca se había sentido como en casa.