Castigado por su amor romance Capítulo 1770

"¡Por supuesto! Soy tu marido y la familia más cercana que tienes. Cuando des a luz esta vez, sin duda te acompañaré y estaré muy cerca a tu lado", dijo Sebastian con suavidad.

Sabrina se lanzó a sus brazos. "Marido, soy tan feliz".

"Duérmete".

Esta vez, Sabrina se durmió rápidamente. Sebastian la envolvió en sus brazos por detrás, y se durmió muy rápidamente.

Al día siguiente, Sebastian se levantó a las cinco de la mañana. Realmente tenía demasiadas cosas de qué ocuparse que lo esperaban. Tenía que ocuparse de los asuntos del Grupo Smith, así como de los de Alex. A través de lo que Sabrina había dicho el día anterior, Sebastian estaba aún más consciente de que en un mes Sabrina debía entrar en parto. Él tenía que terminar todos los asuntos que debía atender durante este plazo, para poder dedicar las veinticuatro horas del día a mantener a su mujer acompañada cuando se acercara la fecha del parto.

A las cinco y cuarto de la mañana, Sebastian salió de casa justo a tiempo y fue directamente al aeropuerto a recoger a Alex. Después, Alex le habló brevemente de algunos de los asuntos que tenían que atender mientras iban de camino al hospital.

Alex le dio una palmadita en el hombro a Sebastian y le dijo sinceramente: "¡Gracias, Sebastian!".

Sebastian sonrió. "No hace falta que me des las gracias".

Alex suspiró. "Sabrina también va a dar a luz pronto, así que ya estabas muy ocupado para empezar. Lo principal es que estos asuntos que tengo que lidiar no pueden ser asumidos por cualquiera. Todos estos asuntos tienen que ver con la estabilización del país y su densidad en las fronteras, así que tú eres el único que me puede ayudar temporalmente a gestionarlo".

Alex miró a Sebastian. "Sebastian, decían que eras de sangre fría y sin corazón, pero solo unos pocos sabemos lo mucho que valoras la lealtad y las relaciones. Lo que me preocupa ahora no es que él no haya hecho movimientos. No tenemos miedo si tiene movimientos porque al menos sabríamos su ubicación. Si tuviera algún problema en la isla, podríamos ir a echarle una mano enseguida. Sin embargo, hace casi un mes que no hay movimientos allí. ¿Qué ha pasado?", preguntó Alex con gran preocupación.

Sebastian se quedó sin palabras. A decir verdad, Sebastian seguía recibiendo llamadas de Holden de vez en cuando, pero últimamente no había recibido ninguna durante casi veinte días. Se sentía un poco inquieto. Sin embargo, pensó que si a Holden le ocurría algo, como mínimo, su padre y su madrastra no estarían tan tranquilos. Una vez que pensó en eso, Sebastian sonrió. "Debe estar bien porque tampoco hay movimientos de mi padre".

Alex asintió. "Eso es cierto".

"Ven, vayamos al hospital. Acabo de llamar al doctor. El doctor ha dicho que su dilatación es de cuatro dedos de ancho, pero que aún no ha dado a luz. Han pasado casi seis horas. Me pregunto cómo estará Jane".