Castigado por su amor romance Capítulo 2420

“¿Qué dijiste?”. Vincent pensó que había escuchado mal.

“Cásate conmigo en una semana”, repitió Belinda.

Vincent se quedó sin palabras. Él no entendió. ¿Cómo podría una señorita de una gran ciudad gustar de un hombre pobre como él que vino de las montañas y quería casarse con él? Para casarse con él, ¿Belinda incluso estuvo dispuesta a hacer tal truco?

“¿Cómo podría ser eso?”, preguntó Vincent sarcásticamente.

Hizo una pausa antes de que volviera a decir: “No entiendo el juego que ustedes, la gente de la ciudad, juegan. Sin embargo, como Helena ya ha caído en sus manos, te daré lo que quieras. Incluso te daría mi vida si lo quisieras. ¡Por favor, no bromees más conmigo, Señorita Kelley!”.

“¡No estoy bromeando contigo!”, dijo Belinda. Había una expresión posesiva en su rostro mientras miraba a Vincent. “Hace tiempo que me encariñe contigo. Tienes buenas notas y eres amable. ¡Aparte de ser pobre, todo sobre ti es genial! Sin embargo, ¡eres pobre y yo soy rica! Es por eso que somos la mejor pareja, ¿no es así? Si te casaras con tu hermana, que no está relacionada contigo por sangre, ambos estarían enamorados, pero como son muy pobres, ¡ambos serían pobres toda su vida!”.

“Disculpa, Señorita Kelley. Que nosotros seamos pobres es nuestro asunto. No me quiero casar contigo. Tampoco estoy acostumbrado a estar en tu círculo social de personas ricas. Solo quiero estar junto a Helena”, dijo Vincent.

“¡Entonces solo espera a que ella muera siendo maltratada por otros!”. Después de decir eso, Belinda reveló una mirada viciosa.

Vincent no tenía palabras.

Vincent estaba tan desconsolado que se volvió completamente loco. “¡Helena! Dime, Helena, ¿te intimidaron? ¿Lo hicieron? ¿Lo hicieron?”.

Helena lloró mientras miraba a Vincent. “Vincent, ¿qué les prometiste exactamente? ¿Por qué me dejaron ir? Aparte de golpearme, no me hicieron nada más. Debes haberles prometido algo, ¿no? Vincent, ¿aceptaste darles cierta parte del cuerpo? Date prisa y dime, Vincent, ¿qué les prometiste exactamente? De lo contrario, no me habrían dejado ir tan fácilmente”.

Al escuchar a Helena decir eso, Vincent de repente sonrió. Él la abrazó y luego lloró angustiado. “Está bien. Está bien, Helena. Está bien mientras estés de vuelta. Con tal de que hayas podido regresar, estoy bien. No me ha pasado nada”.

Helena abrazó a Vincent con fuerza. “Vincent, todo es mi culpa. Fui demasiado codiciosa. Seguía pensando en ganar dinero. Solo pensaba que podía ayudar a aliviar un poco la carga de Wymond. Belinda dijo que podía dejarme ganar dinero. Solo pensé que yo sería capaz de ganar dinero siendo su asistente, ayudándola a cargar sus maletas, cargando sus zapatos y todo eso. Qué genial. Nunca esperé que ella fuera una persona tan viciosa. Vincent es mi culpa. Nunca seré codiciosa por pequeñas ganancias nunca más. ¿Qué tiene de malo no tener dinero? Todo estará bien mientras nos amemos. Cuando me llevaron, pensé que nunca más podría volver a verte en esta vida. Vincent, Nunca más me separaré de ti en el futuro. Incluso si muriéramos de pobreza, ¡tenemos que estar juntos!”.