Castigado por su amor romance Capítulo 2649

Eevonne se quedó sin palabras. Estaba tan emocionada que se sintió eufórica. Era imposible decir que no quería trabajar en una oficina y tener un trabajo más significativo y creativo como esos trabajadores de oficina de alto rango. Eevonne lo deseaba tanto que incluso soñaba con ello. Realmente lo deseaba mucho.

Sin embargo, realmente no se atrevió a pedirle a Kingston y Sabrina: 'Sabrina y Kingston, tengo la capacidad. Simplemente no tengo un diploma. ¿Pueden ambos ayudarme usando su influencia y dejarme intentarlo?'.

Ella realmente estaba demasiado avergonzada para pedir eso. ¿Por qué deberían ayudarla una y otra vez? No importaba si era Kingston o Sabrina, ambos ya la habían ayudado mucho. No podía seguir dependiendo de ellos. Sin embargo, nunca esperó que, incluso sin la ayuda de Sabrina y Kingston, también pudiera captar la atención de los demás con su propio esfuerzo.

Ella se tapó la boca y las lágrimas rodaron por su rostro. Estaba llorando lágrimas de alegría. Luego le preguntó al director del departamento de moda con un poco de timidez: "¿Es este el dicho… de que los verdaderos talentos no deben ocultarse?".

El director se rio de inmediato. "Eres bastante graciosa, pero… ¡sí, lo es!".

Hizo una pausa antes de preguntar: "¿Qué piensas? ¿Qué tal si te unes al departamento de moda y le informo al departamento de recursos humanos hoy?".

"Por favor… déjeme pensarlo", dijo Eevonne. "¿Está bien? Me tomaré un día para pensarlo".

El director respondió de inmediato. "¡Bien! ¡No hay problema!".

"¡Muchas gracias!".

Lo que Eevonne quiso decir con pensar en eso fue, en efecto, discutirlo con Sabrina. En ese momento, Kingston no estaba en la compañía. Lo más diligente que él podía hacer era regresar una vez a la semana para asistir a la reunión de la mañana y hacer arreglos para el trabajo. Estaba fuera de la ciudad el resto del tiempo. En ese tipo de situación, Eevonne solo podía discutirlo con Sabrina. Después de todo, el Grupo Ford era, en general, la compañía de la familia de Sabrina. A pesar de que el Señor Ford prácticamente ya no interfería en los asuntos de la compañía.

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