Castigado por su amor romance Capítulo 2738

Él no sabía cómo se había quedado dormido ni por cuánto tiempo. Solo sabía que ya estaba claro afuera cuando se despertó, y que la luz del sol del exterior era muy cálida. Cuando levantó la cabeza para mirar al techo, se dio cuenta de que estaba en una pequeña casa que estaba en mal estado más allá de toda medida. Giró la cabeza para mirar alrededor y descubrió que la pequeña casa se mantenía limpia y ordenada. Era pequeña, sin embargo, se veía acogedora. Había flores frescas en la mesita de noche y olía refrescante y agradable.

Marcus miró las flores y se distrajo durante unos segundos. De repente, saltó como si se diera cuenta de algo. Solo entonces descubrió que en realidad no llevaba nada puesto. ¡No llevaba nada en absoluto! De arriba a abajo, además de tener la cabeza llena de cabello, estaba completamente desnudo. ¡Dios mío! En ese instante, Marcus sintió que su cerebro estaba teniendo un cortocircuito.

En ese momento, la puerta se abrió con un chirrido. Mila cargaba un recipiente de agua al entrar. Cuando vio a Marcus sentado en la cama aturdido, entró en pánico por un segundo. Después de eso, tragó saliva y comenzó a hablar.

Su voz era ronca y áspera. "E-estás despierto. ¿Te duele la cabeza? Esta es el agua tibia que he preparado para ti. No te muevas. Te limpiaré".

Marcus se quedó sin palabras. Sin esperar que Marcus respondiera, Mila se sentó en la esquina, escurrió la toalla y, de una manera increíblemente natural y sin ninguna timidez, le limpió la frente a Marcus. Él había perdido la capacidad de hablar. ¡Solo sabía cómo estar aturdido! Ni siquiera parpadeó. Mila le limpió la frente y la cara muy meticulosamente. Cuidó a Marcus como si estuviera cuidando a sus propios hijos y fue simplemente extremadamente gentil. Después de limpiarle la cara, levantó el brazo de Marcus y le limpió la axila. Era un hombre fuerte y saludable, por lo tanto las glándulas sudoríparas de sus axilas también estaban increíblemente activas. Cuando ella le estaba limpiando las axilas, su rostro se sonrojó un poco, pero aún así lo limpió muy seriamente.

Después de eso, ella limpió su pecho y espalda. Luego, levantó las sábanas y limpió la mitad inferior de su cuerpo. Su rostro se puso ligeramente más rojo que antes, pero sus acciones seguían siendo naturales. Se arrodilló entre sus piernas como una sirviente que admiraba a su amo y también como si estuviera cuidando una vida preciosa para ella, y los movimientos de su mano eran extremadamente suaves.

Mientras limpiaba su cuerpo por él, ella levantó la cabeza y le preguntó a Marcus: "¿No puedes relajarte un poco? ¿Cómo te sientes? ¿Todavía te sientes mal?".

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