Castigado por su amor romance Capítulo 815

¿No es así?”.

"¡Te estoy preguntando!, ¿no es así?".

En ese momento Ruth no aguantó más, sus emociones estaban al borde del colapso.

Si Ryan no la hubiera abrazado con fuerza, Ruth se habría desplomado en el suelo de tanto llorar.

¡Sus padres!

A los que había llamado mamá y papá durante veinte años... ¿Cómo podría soportarlo emocionalmente?

¿Cómo podría soportarse algo así?

¿Cómo podría olvidarlo?

¿Acaso no podría superarlo?

En los últimos veinte años, la lastimaron y dañaron de forma constante. Ella seguía con vida gracias a que conoció a Sabrina.

Sabrina fue quien salvó su alma, le hizo darse cuenta de sus propios defectos y la ayudó a empezar una nueva vida.

De lo contrario, ella, Ruth Mann, ya estaría muerta.

Su muerte habría sido muy triste.

Ruth había llorado y reído, y finalmente tomó una decisión en su corazón. Dijo con calma: “A partir de hoy, yo, Ruth Mann, he terminado con ustedes. ¡Quiero cortar todos nuestros lazos! Ya no tenemos una relación padres-hija. ¡De ahora en adelante, somos extraños!”.

Después de decir eso, Ruth miró agotada a Ryan y dijo: "Ryan, Primo Marcus, vámonos".

“Ruth…”. El Señor Mann habló ansioso.

“¡Somos extraños a partir de ahora! Por favor, deja de llamarme por mi nombre. ¡Cada vez que dices mi nombre, me disgusta!”.

Al escuchar a la hija a la que habían criado durante veinte años hablarles así, fue imposible para el Señor y la Señora Mann no sentirse mal.

Mientras se alejaba, pudo escuchar los lamentos del Señor, la Señora Mann y de Mindy.

“Mindy, hija mía. Dime… ¿Qué te han hecho?”, preguntó la Señora Mann tartamudeando.

“Ellos… No me dejaron dormir en toda la noche. Eran casi cincuenta hombres... Mamá...", contó Mindy entre sollozos.

La Señora Mann miró hacia el cielo y gritó: "Dios...".

Ruth se subió al coche, y a pesar de que escuchó todo, no se conmovió, solo las lágrimas corriendo por su rostro. Luego les dijo a Ryan y Marcus: "Vamos".

Ryan le preguntó confundido: "Ruth, ¿los… estás dejando escapar?".

Rut asintió. "Dejaré que se defiendan solos".

Después de todo, fueron los padres, quienes la criaron durante veinte años y Mindy a quien llamó prima durante veinte años. Fueron despreciables, pero Ruth no era tan cruel como ellos. Tener casi cincuenta hombres turnándose para aprovecharse de Mindy ya era suficiente castigo para ella.

"Entonces... Tengo que llamar al Tío Sebastian para informarle sobre esto", dijo Ryan de repente.