Consentida por el Presidente: Mi esposa es un poco dulce romance Capítulo 496

Este era sin duda un golpe fatal para Jada cuya imagen era pura e inocente.

Sin embargo, a Joel no le importó.

Él nunca había sido amable con las mujeres que no le importaban.

Si Jada no se hubiera excedido hace un momento, él aún podría ignorar el asunto debido a su apariencia dócil y bien comportada de antes. Sin embargo…

¿Jada pensó que cualquiera podía abofetearlo fácilmente?

Él podía tolerar a Lucy porque la amaba desde el fondo de su corazón y la trataba como a la única.

¿Jada quien pensaba que era para comportarse así? ¿Ella pensó que podría salirse con la suya después de abofetearlo?

Joel se sintió muy raro al pensar en esto.

Lo que él no sabía era que Lucy se estremeció de repente cuando ella escuchó sus palabras.

Parece que ella no era la única mujer…

Los ojos de Lucy se oscurecieron, pero no dijo nada.

Ella no estaba en posición de preocuparse por esto, y lo más importante, no podía.

La situación estuvo estancada por un momento.

Nadie se atrevió a acercarse para detener a Joel, las cuatro personas involucradas tampoco tenían nada que decir.

Los que estaban viendo no se atrevieron a intervenir porque temían enojar a Joel, mientras los que estaban en la situación no tomaron ninguna medida porque no sabían qué decir.

Al final, fue Joel quien rompió el silencio.

Él se volteó y le sonrió a Mace mientras se ajustaba las mangas. “Te daré otra oportunidad. Renuncia a ella y podrás disfrutar de una vida de lujo. Si te rehúsas, arrastraré a la familia Smith hacia abajo contigo”.

Los rostros de Lucy y Mace palidecieron.

Lucy finalmente no pudo soportarlo más.

“Joel, ¿por qué me haces esto a mí? Solo déjame ir”. Lucy se mordió el labio inferior, su tono se suavizó a pesar de eso. “Por favor déjame ir”.

Joel fue sorprendido por la palabra “por favor” por un largo tiempo y no pudo volver a sus sentidos.

Él y Lucy habían sido amigos de la infancia por diez años, y sabía la fuerte voluntad que tenía ella.

Sin embargo, ella le estaba rogando que la dejara ir y que la dejara casarse con Mace.

Entonces, ¿en qué posición se había puesto él?

“¿Él es así de bueno?”. El tono de Joel de repente se calmó mucho, tan calmado que le dio pánico a Lucy.

Lucy lo negó en su corazón. Ella simplemente no quería que él la viera siendo miserable, así que asintió con la cabeza.

“Sí”. La voz de Lucy era muy suave, tan suave que podría no ser escuchada si él estaba un poco más lejos.

Joel había estado esperando la respuesta de Lucy. Él estaba tan ansioso por saber su respuesta.

No obstante, él esperó por tal respuesta.

El cuerpo de Joel se puso rígido.

Él se rio de repente. Su risa se hizo cada vez más fuerte hasta que resonó por todo el lugar.

La risa hizo que Lucy entrara en pánico.

Ella estaba ansiosa por acercarse y abrazarlo, decirle que lo amaba y que no quería casarse con Mace.

Lucy sabía que no podía hacerlo. Ella solo podía sostener a Mace con fuerza en sus brazos sin soltarlo.

El corazón de Mace estaba lleno de culpa, pero se conmovió cuando sintió la tensión del brazo de Lucy.

Él levantó la cabeza y miró a Lucy quien estaba mirando hacia abajo. Él no podía ver su rostro.

Mace solo sintió que nunca la había amado tanto como ahora.

“Lucy, seré bueno contigo. De seguro seré bueno contigo”. Mace le tomó la mano y le prometió solemnemente.

Lucy sonrió reacia sin responder.

Si era posible, ella no quería casarse con Mace, ni quería tratar a Joel así.

Sin embargo, cuando Lucy pensó en su padre adoptivo quien era como una sanguijuela, ella se obligó a no pensar en Joel.

Él era demasiado bueno para ella, ¿no?

Sin embargo, se limitó únicamente al amor familiar.

Lucy aún amaba más a Joel. Ella probablemente podría adivinar cuán profundamente lastimó a Joel hoy, por lo tanto, no pudo evitar preocuparse por él.

Por lo tanto, los sentimientos de Lucy por Joel eran algo complicados.

Mientras ella deambulaba por la calle, de repente escuchó un coche tocando el pito detrás de ella.

Ella miró hacia atrás al vehículo y vio a una persona sentada en el asiento del conductor.

Lucy no podría estar más familiarizada con esa persona. No era otro que Joel; ella estaba sorprendida.

Ella no sabía qué estaba haciendo Joel aquí en este momento.

Lucy sintió que estaba en peligro.

La sensación de que estaba en peligro la impulsó a seguir adelante y correr más rápido a pesar de que tenía tacones.

No obstante, ella seguía siendo mucho más lenta que el coche.

Joel alcanzó a Lucy después de un rato.

El coche se detuvo junto a Lucy.

Lucy no siguió corriendo esta vez. Ella sabía que no podía huir.

“¡¿Qué vas a hacer?!”. Lucy miró a Joel con calma.

Joel salió del coche y caminó hacia Lucy mientras se tambaleaba de forma temblorosa.

Lucy podía oler el alcohol que emanaba de él.

Ella frunció el ceño mirando a Joel. “¿Estás borracho?”.

Joel no respondió a su pregunta. Él de repente la agarró de la mano y la abrazó. “Sígueme”.

Lucy instantáneamente sintió una sensación de miedo.

Ella lo pateó y lo golpeó desesperadamente, tratando de alejarse de él.

Por desgracia, ella no lo logró.