Consentida por el Presidente: Mi esposa es un poco dulce romance Capítulo 498

Sobre Consentida por el Presidente: Mi esposa es un poco dulce - Capítulo 498 Él está en su corazón

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Joel hizo un uso especial del video de vigilancia en la villa para confirmar su punto de vista.

De hecho, el video de vigilancia mostró que Lucy salió de la habitación y de la villa alrededor de las 8:00 a.m.

En otras palabras, Lucy se quedó en esta habitación toda la noche, y Joel claramente recordó que él anoche estuvo con una mujer…

Por lo tanto, este asunto había sido probado más allá de toda duda en su corazón.

Sería una mentira decir que no estaba contento.

Joel había hecho tanto. Él siempre había deseado a Lucy, pero nunca podía tenerla. Solo podía mirarla desde la distancia porque sentía que Lucy no lo amaba.

Después de la noche anterior, ¿él cómo podría seguir creyendo que Lucy no sentía nada por él?

Él estaba emocionado de pensar en ello y estaba muy agradecido con la persona que le había dado la medicina la noche anterior. Si no fuera por la persona, ¿él cómo podría saber sobre el corazón de Lucy?

A pesar de esto, la investigación aún se llevaría a cabo.

Los ojos de Joel se profundizaron, él marcó un número y ordenó: “Ve y averigua quién me siguió anoche. Te daré tres días. Quiero toda la información sobre esa persona en mi escritorio”.

Él colgó el teléfono después de hablar.

Se suponía que Joel debía estar enojado después de la llamada, pero él no había mostrado ninguna expresión desagradable en absoluto. En cambio, estaba muy encantado y su corazón estaba lleno de expectativas.

Él no sabía si Lucy estaría de acuerdo en romper el contrato matrimonial con Mace si la hubiera encontrado esta vez.

Ella lo haría, ¿verdad? Joel se animó a sí mismo en secreto. Lucy estaba dispuesta a cruzar la línea por él. ¿Ella por qué lo rechazaría?

Cuando él pensó en ello, no pudo contener la emoción en su corazón. Él deseó poder aparecer justo en frente de Lucy y atraparla firmemente en sus brazos.

Lo que él no sabía era que Lucy regresó a su apartamento en un estado miserable.

Ella se veía pálida en el camino y era como un alma perdida.

Un taxista la vio y le preguntó con preocupación: “Señorita, ¿estás bien?”.

Lucy apenas sonrió y negó con la cabeza. Ella se aferró a su ropa y se envolvió con más fuerza.

Ella se había dado una ducha antes de irse.

Joel estaba muy loco anoche.

Ella tenía que admitir que Joel tenía lo que se necesitaba para ser tan arrogante, pero para ella, no era placentero, fue un desastre.

Lucy no pudo recordar cómo ella pudo soportar eso. Ella no se atrevió a pensar en los detalles.

Cuando ella estaba en el taxi, estaba alegre de que el conductor no le prestara mucha atención a la industria del entretenimiento.

De lo contrario, una vez que la reconocieran, habría un gran alboroto.

Lucy cerró la puerta con firmeza después de tambalearse a casa.

Ella apoyó la espalda contra la puerta, se deslizó hasta el suelo, se abrazó las rodillas y lloró histéricamente.

¿Qué podía hacer ella? ¿Cómo debería de darle la cara a Joel en el futuro? ¿Cómo podría casarse con Mace?

Ella estaba llena de culpa al pensar en Mace, y no sabía cómo explicarle el asunto.

No, no estaba bien.

Lucy rechazó esta sugerencia en su corazón. Ella necesitaba ocultárlo de Mace.

De lo contrario, Mace se enojaría y no la querría.

Pensando en esto, Lucy lloró cada vez más intensamente.

En realidad, para Lucy, no importaba si Mace la quería o no.

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