Devoción apasionada: la querida esposa del Maestro Fudd romance Capítulo 1074

Para cuando Yanny se dio la vuelta, ya tenía una sonrisa muy cortés y clara en su rostro mientras decía: “Cuánto tiempo sin verte”.

Cuando ella terminó con Samuel cuando tenía dieciséis años, una vez había imaginado todo tipo de escenarios de su reencuentro con él. Sin embargo, nunca imaginó que se reuniría con Samuel en un entorno tan tenso.

Las tenues farolas anaranjadas iluminaban el rostro de Yanny mientras Samuel la miraba. Al final, él soltó una risa impotente mientras decía: “La verdad pensé que esto no sería lo primero que me dirías al encontrarnos”.

Yanny estaba desconcertada mientras lo miraba con una mirada curiosa, y al mismo tiempo Samuel la miraba intensamente mientras decía: “Pensé que ibas a decir que me extrañaste”.

'Han pasado cinco años'.

El hombre había desaparecido por completo de su vida desde los dieciséis hasta los veintiún años.

Yanny se rio entre dientes suavemente y se veía tranquila mientras decía: “No puedo darme el lujo de decirle eso a un exnovio que ha desaparecido de mi vida durante cinco años”.

“Sé que te he… hecho daño en ese entonces”.

Yanny no tenía intenciones de recordar los viejos tiempos con él ni deseaba mencionar los tipos de eventos que se perdieron en el pasado, ya que dijo: “Todo eso está en el pasado ahora y se está haciendo tarde. Ya necesito volver a casa”.

Justo cuando Yanny estaba a punto de extender la mano y quitarse la chaqueta de Samuel, él la abrazó por el hombro y le dijo: “Déjame llevarte a casa. Es muy difícil llamar a un taxi a estas horas”.

Yanny no lo rechazó, ya que su maquillaje se veía intrincadamente detallado mientras vestía un delgado vestido de fiesta. Era una fría noche de invierno y solo se vería como una completa tonta si se quedara sola en la fría noche de la calle.

Ella no quería volverse viral al día siguiente, ya que el titular podría decir: [Mujer con un vestido de fiesta sorprendida de pie en la fría noche mientras se encuentra con un misterioso amante].

Samuel condujo su coche hacia ella antes de abrirle la puerta del asiento del copiloto. Yanny no dijo mucho y entró al coche.

El Bentley negro conducía a paso lento por la calle.

Samuel dijo: “Te he prestado mucha atención todos estos años y escuché que te has convertido en la principal protagonista femenina de ‘Blanco y negro’ de Larry Cross. ¿Se estrenará en la próxima primavera?”.

Yanny asintió suavemente. “Sí”.

Fue una respuesta tranquila.

“¿Por qué tienes que venderte a Shayne Jinn?”. Samuel preguntó rotundamente.

La respuesta de Yanny también fue rotunda. “Lo hice todo por la fama y el dinero”.

Las luces intermitentes brillaron a través de las ventanas y atravesaron el hermoso rostro de Samuel. Sus expresiones parecían tan complicadas como sus turbulentas emociones en ese momento.

Él sabía que le debía demasiado por separarse de ella durante cinco años completos.

El Bentley negro se detuvo repentinamente a un lado de la calle.

Yanny se veía fría y sin emociones.

Samuel se dio la vuelta y la miró antes de decir: “¿Puedes darme una oportunidad más para hacer las cosas bien para ti, Hillary? No te dejaré ir nunca más esta vez y te daré el hogar que siempre quisiste”.

Yanny se rio entre dientes y dijo: “¿Sabes cuál es el mayor problema entre nosotros?”.

“Perdimos cinco años y, si estás dispuesta, podemos compensar el tiempo perdido. El hecho de que me fuera sin decir una palabra, lo que te hizo sufrir tanto en ese entonces, fue completamente mi culpa”.

Yanny se rio entre dientes amargamente mientras negaba con la cabeza, continuaba levantando la cabeza y mirándolo antes de decir: “Ahora soy Yanny y aun así me llamas Hillary. Mira Samuel, si ya perdimos nuestro momento, ya es demasiado tarde. Tú ni siquiera sabes cuál es mi nombre en este momento, así que, ¿qué te hace pensar que puedes decir con seguridad que todavía podemos recuperar nuestro tiempo perdido?”.

“Yanny…”.

Yanny abrió al azar una de las cartas y cuando leyó la carta, notó que la letra de la carta era exactamente igual a la de ella. Era muy difícil saber si era real o no.

“La letra es exactamente la misma que la mía, pero esto no lo he escrito yo. ¿Puedo quedarme con estas cartas por ahora? Necesito averiguar quién falsificó exactamente mi letra para escribirte cartas”.

Samuel se rio entre dientes en un tono decepcionante mientras decía: “Ahora parece… que realmente perdí mi tiempo. Las cartas ni siquiera eran reales. Oh Yanny, ¿lo nuestro de verdad ha terminado?”.

Yanny se mordió los labios y al final dijo: “Llévame a casa, Samuel”.

Ellos permanecieron en silencio durante todo el viaje.

Después de llegar a la entrada principal del Área Residencial de Aguas Azules, Yanny salió del coche mientras Samuel la seguía.

“Espera un segundo”.

Yanny se volteó para mirar al hombre alto y elegante. Como Samuel solía ser un solitario, un aura distante e intimidante emanaba de cada centímetro de su cuerpo. Parecía que cinco años después, el paso del tiempo solo hizo que el hombre pareciera más intimidante de lo que solía ser. Ganó fama por ser un inversor en Londres. El pobre sin absolutamente nada se transformó en un rico inversor en Londres. Su elegancia solo lo hacía parecer más amenazador.

Samuel se le acercó y le dijo: “Una vez me preguntaste por qué solo escribía sobre ti en mi carta de amor. Nunca te dije la razón porque siempre pensé que teníamos más tiempo juntos y que podría explicarte poco a poco la razón en el futuro. Sin embargo, nunca se me ocurrió que nuestra relación terminaría de esta manera”.

“Te diré la razón ahora, entonces. Solo escribí sobre ti porque pienso en ti todo el tiempo en mi corazón y no hubo un día en que paré de pensar en ti. En realidad, me alegro de saber que tú sólo estás con Shayne debido a sus beneficios”.

Él realmente temía que Yanny se hubiese enamorado de otro hombre.

Sin embargo, la eterna confianza de él se había desvanecido esa noche.

Samuel bajó la cabeza y besó la frente de Yanny.

Los labios de él ya se habían alejado antes de que Yanny pudiera reaccionar. Se sintió como un sueño, ya que el beso se sintió extremadamente ligero. Se sentía tan ligero que era como si nada hubiera sucedido.