Devoción apasionada: la querida esposa del Maestro Fudd romance Capítulo 1174

La bolsa de valores estadounidense estuvo abierta por menos de siete horas y la Corporación Haynes ya había perdido dos tercios de sus acciones.

La bolsa de valores estadounidense cerró a las cinco de la mañana.

Steven se levantó débilmente de la silla, con el cuerpo empapado en sudor. Sentía las piernas como gelatina.

Maria dijo con los ojos enrojecidos: “Llamaré a Shayne y le suplicaré. Soy su madre biológica, así que, ¿cómo pudo ser tan despiadado?”.

Luego, Maria tomó su celular y llamó a Shayne.

En ese momento, era de noche en la Ciudad del Norte.

Cuando cerró la bolsa de valores de Estados Unidos, Shayne tapó su computadora portátil. El celular a su lado sonó.

Era un número internacional. Shayne no guardó el número, pero lo recordó claramente.

Él miró inexpresivamente el celular sonando durante mucho tiempo antes de contestar lentamente y con calma.

Cuando contestó la llamada, él no dijo nada.

Él no tenía nada que decirle a Maria. Ya sea odio o repugnancia, todo se expresó en la bolsa de valores de la noche anterior.

Ellos permanecieron en silencio durante mucho tiempo cuando Maria, al otro lado de la línea, se atragantó al final y dijo: “Shayne, sé que me odias. Desde que tenías diez años, me odias. Pero tu padre y yo estábamos en un callejón sin salida en nuestro matrimonio. El accidente no fue el final que quería. Pensé en discutirlo adecuadamente con él y seguir adelante con el divorcio. Sin embargo, nunca pensé que algo así sucedería”.

“¿Y qué hay de Yanny? ¿Por qué tuviste que unir fuerzas con Cara para lidiar con ella? ¿Qué mal hizo ella? Incluso si me odiabas por no ayudarte, no debiste descargar tu odio hacia Yanny. Búscame a mí. ¿Por qué tuviste que ir tras Yanny?”.

Maria se mordió el labio y explicó en voz alta: “¡No quería ir tras Yanny! Incluso si no nos llevábamos bien, ¡no soy tan intolerante! Solo estaba desesperada. La Corporación Haynes tuvo un momento difícil hace dos años. Steven y yo necesitábamos el capital. Tiré mi dignidad para volver a rogarte, pero tú me rechazaste muchas veces. Estaba desesperada y no tenía elección. Solo pude arriesgarme y cooperar con Cara una vez. Pensé que tú y Cara tenían una clase de relación también. Si Yanny ya no fuera tu esposa, quizás te casarías con Cara”.

“Para entonces, podría usarla y conseguir algo de capital, y podría aprovechar la oportunidad para enmendar nuestra relación. Shayne, realmente no tuve otra opción. Por Steven, de verdad tenía que arriesgarme. Incluso si existía una gran posibilidad de que terminara en un fracaso, todavía tenía que hacerlo”.

Shayne se rio burlonamente. “¡Realmente lo planeaste todo! Señora Maria, desde el principio nunca me trataste como tu hijo. Para mí, no soy más que un cajero automático de la Corporación Haynes. Cuando uniste fuerzas con Cara para lastimar a Yanny, ¿alguna vez pensaste que Yanny era tu nuera? Ella era el amor de tu hijo, ¡el que estuvo en tu vientre durante diez meses!”.

“Lo siento, Shayne. En ese momento, de verdad estaba ansiosa. La Corporación Haynes estaba a punto de enfrentarse a una ruptura en la cadena de capital y se declaró en bancarrota. Estaba desesperada. Si la situación no fuera tan grave, no me habría mezclado con una persona malvada como Cara…”.

“¡Suficiente!”. Shayne gritó en la llamada.

Maria respiró hondo. Ella cerró los ojos. “Sé que todo lo que diga ahora no tiene sentido. Sin importar cómo te explique, no me creerías. Pero Shayne, una cosa que debes tener claro es que debería haberme disculpado contigo y con Yanny. Ni Steven ni la Corporación Haynes estuvieron involucrados en esto. Actué en esto completamente sola. Sin importar como quieras que te lo pague de vuelta, no incluyas a Steven en esto, por favor”.

“Steven, Steven…”. Shayne se burló y apretó los dientes. “¿Acaso amaste a mi padre?”.

Maria se rio. “Sí, pero nuestro matrimonio fue solitario al final. Tu padre y Steven son dos personas diferentes. Quizás a los ojos de muchas personas, tu padre es el exitoso. Es verdad que Steven no puede compararse con tu padre en términos de hacer negocios. Los tres fuimos compañeros de universidad y buenos amigos una vez. Tu padre siempre estaba ocupado con el trabajo y los negocios. Por lo tanto, siempre tuve que estar con Steven. Steven no era tan elegante y majestuoso como tu padre, pero le ganó a tu padre cien veces más en términos de ser gentil y cariñoso. Shayne, en esta vida, no todos pueden amar con determinación a una sola persona. Mi amor por tu padre se transfirió lentamente a Steven a lo largo de nuestro largo y solitario matrimonio. Puedes decir que soy un irresponsable o que quizás traicioné a tu padre. No importa cómo me veas, Steven es inocente. Era yo a quien no le importaba nada”.

Qué broma, justificar mentalmente el engaño a otra persona.

“Como no amabas a mi padre con tanta determinación, ¡no debiste casarte con él en primer lugar!”.

Shayne tiró violentamente su celular al suelo. El celular se hizo añicos.

Él se sentó en su silla, cubriéndose la cara con ambas manos.

Debido a que se quedó despierto hasta tarde prestando atención a la bolsa de valores de Estados Unidos, tenía los ojos inyectados en sangre. Estaba despeinado y desolado.

Shayne comenzó a sospechar si su terquedad estaba mal.

Si él perdonara a Maria antes y accediera a ayudarla con sus problemas financieros, ella no habría aceptado unirse a Cara para confabular contra Yanny en ese entonces.

Quizás, en ese momento, él y Yanny hubieran tenido su boda en paz, teniendo una vida que todos envidiarían.

Yanny tampoco habría tenido un aborto espontáneo.

Al final, la terquedad de él por aferrarse al odio acabaría consumiéndolo.

Shayne se rio entre dientes, con el rostro pálido. No esperaba que Maria fuera una de las principales fuerzas detrás de esto.

Podría haber sido Cara o cualquier otra persona y no se habría sorprendido. Sin embargo, ¿por qué tenía que ser Maria?

Esa mujer también era su madre biológica.

¿Cómo iba a responderle a Yanny?

…

Yanny recibió una llamada telefónica del hospital.

“¿Usted es la Señorita Yanny? Le llamamos del Hospital General del Pueblo. Su padre Winson Jacob fue enviado aquí hace media hora por sus vecinos. Él se cayó debido a un derrame cerebral cuando no había nadie en casa. ¿Podría venir rápidamente?”.

Yanny se sorprendió. Ella apretó su celular y no dijo nada durante mucho tiempo.

“¿Señorita Yanny? ¿Señorita Yanny?”.

Solo entonces Yanny recobró el sentido. Ella respondió: “Está bien. Gracias”.

Cuando colgó, ella guardó silencio por un largo tiempo.

Ella había odiado a Winson durante casi un siglo. Desde que era joven hasta que se convirtió en adulta, no había un día que pasara sin odiar a esta persona.

Winson fue el que causó la muerte de su madre e hizo que ella careciera de amor paternal, haciéndola pasar casi toda su vida recuperándose de su terrible juventud.

Al final, nada bueno le había sucedido a ese hombre.

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