Devoción apasionada: la querida esposa del Maestro Fudd romance Capítulo 276

De pie frente a la sala, Heaton respiró hondo y calmó sus emociones antes de entrar.

Verian estaba acostada en la cama. Ella acababa de recibir una inyección y su expresión era pálida. Una vez que vio a Heaton, preguntó ansiosamente, "Heaton, ¿qué dijo el doctor?".

Heaton quería decirle la cruda verdad de que el doctor no logró salvar al bebé, pero no pudo hacerlo cuando vio su expresión ansiosa.

Se acercó, se sentó junto a su cama y levantó la mano para acariciar su cabello. Sus delgados labios se curvaron hacia arriba mientras acariciaba su cabello. "Está bien. El doctor dijo que tienes que cuidar tu salud y que es mejor si descansas bien sin que te molesten”.

Verian bajó la cabeza y deliberó sobre sus palabras antes de mirarlo y preguntar en un tono incierto, "¿En serio?".

Heaton miró de nuevo sus ojos llorosos y asintió. ¡Duerme primero! Estaré aquí por algún tiempo y no me iré".

"Muy bien".

Heaton la ayudó a acostarse sobre su espalda. También desdobló la manta arrugada y la enrolló hasta su barbilla para mantenerla caliente. Verian intentó dormir después de que Heaton la arropara, pero fue en vano. Ella dio vueltas y vueltas en la cama, pero no pudo conciliar el sueño.

"Heaton, no puedo quedarme dormida".

Heaton levantó la mano hacia ella y le tapó los ojos. "Cierra los ojos y podrás dormirte rápidamente".

Verian se quedó sin palabras.

Durante todo el día, Heaton hizo del hospital su lugar de trabajo e hizo todo su trabajo allí. A la mañana siguiente, cuando Verian se despertó, todavía estaba en el hospital junto a ella.

"¿No necesitas ir a la oficina hoy? ¿No dijiste que estoy bien? Probablemente deberías ir a trabajar".

En lugar de irse, Heaton la levantó. “Podemos irnos del hospital hoy, y no voy a trabajar. Te acompañaré a caminar afuera hoy".

Verian se sintió aturdida después de que la sacaran de la cama, y lo miró con confusión. "¿No dijo el doctor que necesito descansar bien? ¿Todavía puedo pasar el rato contigo?".

"Está bien. El doctor también dijo que debes estirarte y caminar alrededor. Además, no estamos haciendo ningún ejercicio extenuante. Solo te llevaré a comer cosas que querías comer y a ver una película juntos".

Verian sonrió como un gato de Cheshire y abrazó su cuello. "¿Se considera esto una cita entonces?".

Heaton respondió impasible, "Sí".

Después de que Verian se cambió en el baño y salió, Heaton se agachó para ayudarla a ponerse los zapatos.

Se dirigió al baño para lavarse mientras Heaton iba al mostrador y pagaba las facturas médicas de Verian. Luego la llevó a desayunar.

Cuando estaban en el auto, Heaton preguntó, "¿Qué te gustaría desayunar?".

Verian lo pensó durante mucho tiempo. Al final, decidió lo que quería comer. "Hmm, quisiera comer arroz al vapor y pudín de tofu de los puestos que están cerca de la Escuela Secundaria de Ciudad del Norte".

Ella no esperaba que él la escuchara realmente, encendiera el auto y la llevara a los puestos de desayuno que mencionó.

Después de estacionar el auto, Heaton la hizo sentarse al aire libre junto a uno de los puestos de desayuno.

Verian se sentó obedientemente a la mesa, pero también le recordó rápidamente a Heaton cuando lo vio comprar arroz al vapor para ella en un puesto cerca de su mesa. “Heaton, no quiero arroz con sabor dulce. ¡Quiero de ese tipo que tiene guisantes!".

La Tía anciana que vendía el arroz al vapor escuchó la conversación de ella con Heaton y se burló de él. "¡Muy bien! A su esposa le gusta comer alimentos salados. ¡Le pondré algunos guisantes y mostaza en escabeche!".

La Tía anciana tenía mucha experiencia y era muy hábil. En poco tiempo, pudo empacar un paquete de arroz al vapor glutinoso negro antes de pasárselo a Heaton.

Heaton también pidió un tazón de pudín de tofu y lo llevó a la mesa.

"Come mientras estén calientes".

Verian se sintió extraña al notar que solo había comprado un paquete. "¿No vas a comer conmigo?".

"No tengo hambre. Deberías comerlos mientras aún estén calientes".

Heaton no era una persona que desayunara. Además, hoy no estaba de humor para comer.

Verian le sonrió tontamente mientras su saliva casi se escurría por su boca mientras sostenía y olía el cálido arroz negro glutinoso al vapor en sus manos. "¡Comeré primero entonces!".

En su primer bocado, pudo degustar los buñuelos, el jamón, los guisantes salados y la mostaza en escabeche. Ella también probó un poco de hilo de pollo dentro. Los buñuelos estaban extremadamente crujientes y el arroz era fragante. Verian realmente lo disfrutó mucho.

Cuando estaba en la escuela secundaria, le encantaba comer arroz al vapor y un tazón de budín de tofu todas las mañanas cuando podía.

Ella echaba de menos el sabor, ya que había pasado mucho tiempo desde que comió ese tipo de comida.

Mientras Heaton la veía comiendo contenta, su expresión y ojos se suavizaron. "¿Está tan bueno?".

"¡Si! ¿Quieres comer algo?".

Verian le pasó el arroz al vapor que había comido a medio camino directamente a la boca de Heaton. Solo cuando hizo esto, sintió que era un poco antihigiénico. Justo cuando ella quería pedirle a Heaton que comprara otro, él ya estaba sosteniendo su muñeca y bajó la cabeza para darle un mordisco.

Verian se sentó cara a cara frente a él y sus orejas se estaban poniendo rosadas. "¿Está rico?".

Heaton asintió impasiblemente, "Está rico".