Devoción apasionada: la querida esposa del Maestro Fudd romance Capítulo 372

Yandel acababa de acostarse cuando sonó el teléfono.

El identificador de llamadas mostraba el nombre de Yale.

"Hola, segundo joven maestro. Jean se ha escapado".

"Mhm". Yandel respondió débilmente. "Ya veo. ¿Se han manejado los asuntos de Sean?".

"Está hecho. Sean ha estado tomando drogas durante bastante tiempo. No puede salir durante al menos seis meses, tal vez incluso hasta un año".

"Observa a Jean de cerca".

"Seguro".

Después de colgar, Yandel miró la brillante pantalla de su teléfono celular. En la pantalla había una niña acostada durmiendo en una mesa. Sus pestañas eran muy largas y llenas, parecían pequeños abanicos. Se veía muy educada y tranquila.

El hombre se sentó en la cama y miró la pantalla de su teléfono durante mucho tiempo con sus ojos claros y gentiles. Las comisuras de su boca se curvaron antes de volver a la cama con su teléfono.

Allí colocó el vestido de Xylean debajo de la almohada.

A lo largo de los años, Xylean siempre había logrado escapar de él. Dentro de los 365 días del año, probablemente hubo alrededor de 300 días en los que estuvieron separados. La calidad del sueño de Yandel era muy mala, por lo que solo pudo conciliar el sueño después de poner la ropa de Xylean debajo de la almohada.

Esta noche, aunque Xylean no estaba durmiendo junto a él, su corazón se sentía muy cálido por el beso que le había dado. Su corazón se sentía tan bien, era como si estuviera disfrutando del agradable clima de principios de primavera.

...

Mansión de la familia Soan.

Viéndose muy avergonzada, Jean volvió a casa. Ella juró, "No he estado en casa estos últimos días. ¿Por qué no me buscaron? ¡No me están tomando en serio! ¡Soy la maestra aquí! Yannis ya se ha divorciado de Eric. ¡Soy la única dueña de esta casa!".

Los sirvientes fueron regañados hasta que sus corazones temblaron. Parados allí con miedo, no se atrevieron a hablar.

Eric escuchó el ruido del estudio de arriba y bajó. "¿Qué pasa con la pelea?".

Tan pronto como Jean vio a Eric, se burló. "Sabías que estaba en manos de Yandel. ¡¿Por qué no llamaste a la policía?!".

"¿Llamar a la policía? ¡¿Todavía quieres armar un escándalo frente a la policía después de hacer todas esas cosas sucias?!".

"¿Qué cosas sucias he hecho? ¡Eric, soy tu esposa! En tu corazón, ¿sigues favoreciendo a Yannis— esa perra al borde de la muerte?".

Al ver la arrogancia y el feo comportamiento de Jean, Eric frunció el ceño con disgusto. "En ese entonces, enviaste a alguien para que se llevara a Rainie e hiciste que Yannis no pudiera ver a su hija biológica durante casi 24 años. Jean, ¿es esto algo que haría un ser humano razonable? ¡Rainie también es mi hija!".

"Hmph, así que ahora has cambiado de bando. Tú fuiste quien accedió a dejarme ser la maestra de la familia Soan, pero tuve que esperar tantos años, mirándote a ti y a Yannis teniendo un hijo tras otro. ¿Alguna vez te preocupaste por mis sentimientos? ¿No es patético que Sean y yo seamos tratados con frialdad cuando ni siquiera estamos en casa?".

Eric tenía emociones encontradas. Frunciendo los labios, dijo, "Es bueno que hayas vuelto ahora. Hablemos de algunos asuntos serios. No quiero hablar contigo sobre el pasado. No importa si tenías razón o no, no voy a hacerte responsable".

"¿Qué quieres decir? ¿De qué quieres hablarme?" Jean lo miró con recelo.

"Hablemos de nuestro divorcio...".

Las palabras apenas habían salido de la boca de Eric cuando Jean gruñó, "¡En tus sueños! ¡Eric, te lo digo! He sacrificado tantos años de mi vida por ti y no fue fácil para mí conseguir el puesto de la Sra. Soan. ¡Incluso si muero, quiero morir como la Sra. Soan! ¿Quieres enmendar tu relación con Yannis, eh? ¡Será mejor que abandones la idea porque no voy a ceder!".

"¡No tiene nada que ver con Yannis! Jean, solías ser tan comprensiva. ¿Por qué te has vuelto tan cruel y paranoica ahora?".

"¿Comprensiva? ¡Hmph! ¿Por qué? Ahora que ves mis verdaderos colores, ¿estás pensando que no deberías haberte divorciado de Yannis?".

Las cejas de Eric se fruncieron más profundamente. "Jean, no esperaba que te volvieras así. Para ser honesto, desde que nos casamos, pusiste a nuestra familia en desorden. No ha habido un solo día de paz para nosotros. ¿Puedes dejar de causarme problemas? Si cambiaras tu atención en educar a Sean, ya no estaría tonteando por ahí".

Débilmente, Heaton preguntó, "¿Qué pasa? ¿Quieres actuar coquetamente otra vez para rogarme que te deje quedarte?".

"Por supuesto que voy a regresar a Ciudad del Norte contigo. Solo estoy reflexionando s.obre lo que dijo mi mamá. Ella dijo que un esposo es alguien de quien no puedo quedarme muy lejos. Así es como un esposo y una esposa deberían ser".

Al escuchar esto, los labios de Heaton se curvaron hacia arriba mientras sonreía suavemente. Él la miró juguetonamente. "¿Te preocupa que vuelva a Ciudad del Norte a buscar chicas bonitas?".

"¡Argh!", Verian lo miró y dijo, "Si te atreves a encontrar una chica hermosa en Ciudad del Norte, buscaré a un chico guapo en Ciudad del Sur".

Heaton se burló deliberadamente de ella. "¿Tú? Eres una mujer embarazada. Aparte de mí, ¿a quién le gustaría?".

"...".

Verian lo pellizcó.

Después de golpear a Heaton por un tiempo, le dio unas palmaditas en la cintura a Verian. "Suficiente. Vamos a despedirnos de tu hermano y los demás. Luego, iremos al aeropuerto".

...

Al despedirse de Yandel y Xylean, Verian abrazó a Xylean.

Verian le dijo, "Mantente feliz con mi hermano".

Xylean se saltó el tema y dijo, "Iré a Ciudad del Norte a verte a ti y a Porotita Dulce cuando esté libre".

"Bien".

Kush puso todo el equipaje y las bolsas en el maletero mientras Heaton abría la puerta del coche. Con una mano en el techo del auto, abrazó la cintura de Verian con la otra. "Entra en el coche".