Devoción apasionada: la querida esposa del Maestro Fudd romance Capítulo 716

"¿La única cosa es qué, exactamente?".

Nueve recordó la piel quemada y marcada, debajo de su clavícula, cuando explicó con el ceño ligeramente fruncido, "Lo único es que su pecho del lado izquierdo parece haber sido quemado, por algún tipo de hierro para marcar. La piel alrededor de esa área ya ha comenzado a necrosarse. Si ella no quiere que le quede una cicatriz en esa área, ella tendrá que esperar a que esa parte sane, antes de que pueda realizar cualquier tratamiento adicional".

"¿Hierro de marcar?".

Un destello peligrosamente amenazante cruzó por los ojos de Blaine.

¿Esa gente realmente se atrevió a torturarla con un hierro para marcar? Blaine solo fue consciente de los azotes cuando la rescató y, debido a lo ensangrentada que ella estaba, Blaine no notó la marca quemada en el lado izquierdo de su pecho.

Nueve dijo, "El presidente ha cruzado la línea, esta vez. He escuchado rumores sobre el calabozo de Paul, pero nunca había esperado que sus subordinados fuesen lo suficientemente despiadados como para hacerle algo así a una mujer. Sin embargo, director, esta mujer es fuerte y en realidad no se quebrantó. Si yo fuera el que hubiese estado siendo torturado así, podría haberme quebrantado mucho antes".

Después de que el equipo médico se fue, la Tía Heather subió las escaleras y dijo, "La sopa de hierbas está lista, Amo. ¿Debería servirle a la Srta. Blandita, ahora?".

Mientras Blaine estaba junto a la puerta, él miró intensamente a la mujer dormida en la cama, mientras hablaba en un tono suave, "Déjala dormir un poco más".

"Sí, Amo Blaine".

Después de que la Tía Heather bajó las escaleras, Blaine, que estaba cuidando a la mujer inconsciente, le preguntó al Viejo K, "¿Te has ocupado de esos dos guardias?".

"Ya han sido enviados a una celda oculta. No los dejaremos morir de inmediato. No se preocupe, los mantendremos con vida, solo un par de días más".

Blaine estaba inexpresivo, cuando respondió con un calmado ‘seguro’, antes de continuar, "Pregúntales sobre quién exactamente quemó a Blandita, con el hierro para marcar".

"Muy bien, haré que alguien interrogue a los guardias".

Blaine actualmente no tenía intención de ocuparse del asunto, por lo que él ordenó, "Puedes irte ahora".

"Sí, director".

Blaine solo entró a la habitación después de que Viejo K se fue. Él se sentó junto a la cama, mientras miraba a la mujer con un ojo gentil.

Blaine levantó la mano y tocó suavemente el moretón en la esquina de sus labios, antes de bajar la mirada. Él suavemente movió su pijama y notó la piel quemada debajo de su clavícula del lado izquierdo.

Blaine luego abrió más su cuello. Sus pupilas se contrajeron significativamente cuando miró fijamente el lugar.

Aunque le habían aplicado medicina a sus heridas, la zona quemada era desgarradora de ver y dejaría una cicatriz del tamaño de la mitad de la palma de una persona, cuando finalmente se curara. Aunque las otras marcas de latigazos se desvanecerían con el tiempo, la parte de su piel que se había necrosado no se recuperaría sin la ayuda de una cirugía.

Cuanto más tiempo Blaine miraba la herida, más fría se volvía su mirada.

Él en realidad no tenía ni idea de los agonizantes dos días de pura e infernal tortura que ella tuvo que soportar.

Si él hubiera llegado incluso un solo día más tarde, podría haber encontrado su cadáver en su lugar.

Sus palmas instintivamente se extendieron para acariciar suavemente su pequeña cara. Él era extremadamente cauteloso en sus movimientos, preocupado por no lastimarla. Le hacía parecer como si estuviera tocando a una persona hecha de vidrio.

No se sabía cuánto tiempo Blaine cuidó a Ruby, antes de que ella comenzara a despertar gradualmente.

Parecía que todos los receptores del dolor, en todo su cuerpo, se despertaron tan pronto como ella despertó. El dolor agudo hizo que frunciera el ceño con tanta fuerza, que incluso sus hermosas mejillas comenzaron a arrugarse por el dolor.

"Si el dolor es realmente insoportable, puedo hacer que aumenten la dosis de analgésicos", le dijo Blaine, mientras la ayudaba a levantarse.

Mientras Ruby se recostó en su suave almohada mientras se sentaba, sacudió la cabeza mientras miraba a Blaine y dijo, "Ya no duele tanto, ahora".

Los analgésicos no eran exactamente buenos para su cuerpo. Si su cuerpo desarrollaba una tolerancia hacia ellos y sufría un disparo o cualquier otra cosa en el futuro, no serían tan efectivos como antes.

"Tengo hambre, Blaine".

Comer comida era la forma más rápida de recuperarse.

Blaine la alimentó personalmente, cuando la Tía Heather llevó la sopa de hierbas recién hecha al piso de arriba.

"Puedo alimentarme sola, Blaine".

Blaine insistió mientras decía, "Mira lo graves que son tus heridas. Solo se una buena paciente, está bien".

Ruby se quedó sin palabras.

Cuando Blaine le dio una cucharada de sopa, él la miró y simplemente le dijo, "Sé una buena chica, ahora. Abre grande".

Aunque un tazón de fideos se interponía entre ellos, eso no pudo evitar que Blaine la besara.

Después de que el hombre terminó de besarla, le dio un suave beso en la herida de la esquina de los labios.

"Continúa comiendo, entonces".

Ruby se quedó sin palabras.

Ruby levantó el tazón de fideos, cogió el tenedor, bajó la cabeza y siguió comiendo en silencio.

Ella era completamente incapaz de resistirse a ser besada por Blaine. Era raro que ella se encontrara en un estado tan débil, por lo que esto le permitió a Blaine aprovecharse aún más de ella.

Él la miró con una mirada cálida y ardiente.

Sin embargo, como ella había sufrido una lesión tan grave, él no la iba a intimidar mientras estuviera débil. Él no era una bestia desalmada.

Ruby estaba algo llena, después de que terminó su plato de Aglio e Olio.

Blaine preguntó, "¿Quieres otro tazón?".

Ella había comido bastante, así que se frotó la barriga y respondió con tono alegre, "No soy un cerdo".

Después de eso, Blaine levantó la mano para acariciar suavemente sus cejas. Luego le habló en un tono tranquilo, pero extremadamente serio. "Siento mucho haber regresado a casa, tan tarde".

Si él hubiera sabido que la lastimarían tan gravemente, hasta el punto de casi perder la vida, se habría apresurado a regresar a casa para salvarla, sin importar si todavía estaba en una misión o no.

Ruby tomó la mano de Blaine mientras hablaba, con una sonrisa, "Yo estoy muy contenta de que pudiste venir a salvarme, Blaine".

"¿Pensaste que no vendría a salvarte?".

"Si. Ya que él sigue siendo el presidente y yo no soy más que una callejera que recogiste. Obviamente suponía que no te pondrías en contra del presidente, por mi bien".

Además, Blaine una vez había sospechado que ella era una espía.