Devoción apasionada: la querida esposa del Maestro Fudd romance Capítulo 751

Blaine fue a trabajar a su estudio a la mitad de la noche.

Cuando se fijó en el sofá, recordó casi haber pecado horriblemente ese día cuando estuvo a punto de comprometerse con Cindy. De alguna manera eso hizo que el sofá se convirtiera en una visión extremadamente dolorosa para sus ojos.

Hizo que el ama de llaves cambiara el costoso sofá inmediatamente a la mañana siguiente.

...

Temprano a la mañana siguiente.

Cuando Ruby despertó a la mañana siguiente, bajó a la sala de estar después de hacer algunos estiramientos. Sin embargo, Cindy no estaba por ninguna parte.

"¿Dónde está la Srta. Nelson?".

Blaine levantó ligeramente las cejas mientras se sentaba junto a la mesa del comedor. "¿Qué pasa? ¿Realmente tienes ganas de verla todas las mañanas?".

Ruby se sentó al otro lado de la mesa frente a él, tomando una tostada y comiéndola mientras respondía: "Ay, por favor, resulta que la Srta. Nelson es tu mujer amada. Tanto que estás dispuesto a dejar que tenga todo el dormitorio principal sólo para ella. ¿Por qué me preguntas lo obvio?".

"Sólo la dejo tener el dormitorio principal porque no puedo molestarme en discutir con ella", explicó Blaine con calma.

Ruby asintió mientras decía despreocupadamente: "Vaya, ¿la idea de traerla a casa contigo también fue porque no pudiste molestarte en discutir con ella?".

Blaine se detuvo mientras sostenía su cuchillo, mirando a la envidiosa mujer. Le pareció divertida su reacción.

"Por supuesto que no me molesté en discutir con ella. Precisamente por eso la traje a casa".

Ruby se rió burlonamente.

Tomó su vaso de zumo de frutas y bebió un sorbo.

Sin embargo, antes de que pudiera tragar, vio que Blaine se veía serio mientras hablaba: "Al principio quería ponerte celoso trayendo a Cindy a casa, pero supongo que a ti te hace poco o ningún efecto".

"Pfft”. Toz, toz...

Ruby se ahogó con su zumo de fruta.

Un poco de zumo de fruta salió de su boca.

Blaine extendió la mano desde el otro lado de la mesa y utilizó las puntas de sus dedos para limpiar la mancha en el borde de su boca.

"No, para. Puedo hacerlo yo misma".

No estaba seguro si Ruby se había atragantado con el zumo de fruta o si estaba demasiado nerviosa por su comentario. Tomó un pañuelo de la mesa y se limpió apresuradamente su boca.

Blaine retiró el brazo y sonrió mientras miraba su cara.

...

Blaine salió después del desayuno.

Llegó a la Casa Real.

El presidente resultó ser un miembro de la familia Glaceau. Era el tío de Blaine, Corry Glaceau.

Corry estaba vestido con un traje mientras daba un paseo con ambas manos a la espalda, disfrutando de la vegetación de la finca. Habló en un tono casual: "Oh Blaine, siempre te he considerado un hombre maduro y racional. Después de todo, has sido el Director durante tantos años y has pasado por tantas cosas. ¿Cómo puedes actuar ahora de forma tan impulsiva?".

"¿Te refieres a la crítica que te ofrecí en la reunión, hace unos días?".

Corry se dio la vuelta y miró intensamente a Blaine antes de intentar ser redundante: "Por mucho que no quiera que trabajes junto a esa banda de serpientes, siguen siendo extremadamente importantes para el país. Tienes que vigilar el poder de la familia que los apoya. Aunque no puedan afectarte mucho, alguien en tu posición debe tener mucho cuidado con ellos".

Blaine no prestaba atención mientras le daba una respuesta tranquila, antes de guardar silencio y pasear por la finca con Corry.

Corry se rió mientras decía: "No entenderás las razones de mi regaño, Blaine. En realidad ¿qué pasa con esa mujer? ¿Es realmente parte de la Organización de la Luz o no?".

"Lo era, pero ya no".

Corry frunció un poco el ceño y dijo: "Parece que esos ancianos no se equivocaron contigo. No importa si sigue siendo parte de la Organización de la Luz o no, en algún momento fue miembro. Es una etiqueta que llevará por el resto de su vida. Sé que es ofensivo escuchar esto, pero Blaine, ¿crees que serás capaz de silenciar a esos ancianos si te empeñas en seguir junto a esa mujer?".

Corry le dejó una fuerte advertencia: "¡Ten cuidado, Blaine! Si lo has decidido, abandona inmediatamente Ciudad Glaciar. Quedarte aquí incluso un segundo más, no es seguro para ti".

"De acuerdo".

...

La expresión de Blaine parecía extremadamente fría cuando entró en el coche.

El Viejo K miraba a Blaine a través del espejo retrovisor mientras conducía, antes de hablar en tono cauteloso: "Amo Blaine, ¿está el presidente descontento con la Srta. Luna?".

Blaine respondió con un simple "sí", antes de continuar: "Mañana partiré hacia las fronteras del Oeste. Tú te quedarás aquí en Ciudad Glaciar para vigilar lo que hagan esos ancianos. Ponte en contacto conmigo cuando lo necesites".

El Viejo K se quedó atónito mientras decía: "¿Te han enviado a las fronteras del Oeste por la Srta. Luna?".

"No", respondió Blaine sin dudar.

Sin embargo, su respuesta no convenció a nadie.

Los estatus de Blaine y Ruby eran demasiado especiales. Que se quedaran el uno con el otro era como una bomba esperando a explotar, ya que sus identidades hacían difícil que estuvieran el uno con el otro.

El Viejo K preguntó: "Bueno, entonces... ¿llevará a la Srta. Luna cuando parta hacia las fronteras del Oeste?".

Blaine retiró la mirada antes de responder monótonamente: "No voy a ir de vacaciones a las fronteras del Oeste, así que ¿por qué debería llevarla conmigo? Si la traigo conmigo, esos ancianos sin duda correrán la voz de que la llevé para calentar mi cama en medio de todo el caos".

El Viejo K no quería reírse, pero dejó escapar una risa mientras decía: "Buen punto".

"Sin embargo...". La mirada de Blaine se oscureció mientras continuaba: "Me preocupa que la familia Glaceau pueda tratarla mal. Infórmame si sucede algo".

El Viejo K se quedó perplejo y dijo: "La familia Glaceau es su familia, Sr. Blaine. Todos ellos saben cuánto quiere usted a la Srta. Luna. En ese caso, ¿se atreverán a hacerle algo a la Srta. Luna?".

"Es por mis sentimientos hacia ella que intentan hacerme daño. No se molestarían si fuera cualquier otra persona. Lo que pasa, sin embargo, es que tengo la tendencia a que me gusten las mujeres que son diferentes a lo usual".