Devoción apasionada: la querida esposa del Maestro Fudd romance Capítulo 759

Desayunaron juntos cuando llegaron a la cafetería.

Ruby bebió un poco de sopa y dijo: "Pero no me malinterpretes, solo me voy a quedar aquí unos días. Ni se te ocurra obligarme a quedarme aquí contigo, durante un año y medio".

"¿A dónde vas a volver?".

Ruby levantó las cejas y contestó con un tono despreocupado: "Por supuesto que volveré a mi casa. Para que sepas que yo también tengo una mansión propia y no tengo que depender de nadie más".

"Te despidieron de la Organización de la Luz. Nadie podrá protegerte, si vuelves al País Z".

Ruby arrugó los labios y dijo: "¿Realmente necesito la protección de alguien con las habilidades que tengo? Además, mi mansión está bien equipada con sistemas de defensa. Nadie podrá asaltar mi mansión. Es el lugar más seguro para dormir".

Blaine tomó un trozo de pollo y se lo metió en la boca, impidiéndole que siguiera hablando.

"No quiero oír nada de que me dejas, así que céntrate en comer tu comida".

Por no hablar de que hizo esa declaración de una manera tan despreocupada. Qué despiadada, sin duda.

Ruby le dio un mordisco furioso al pollo antes de decir: "¿Me vas a dejar salir de este lugar o no?".

"Oh, Blandita, acabas de recuperar tus recuerdos. ¿No crees que deberías interactuar más conmigo ahora?".

Blaine estaba un poco molesto por lo poco que le importaba.

Ruby infló sus mejillas mientras comía pollo. Dijo: "Mira, no voy a buscar a otro hombre cuando vuelva a casa ni tienes que preocuparte por verme embarazada cuando vuelvas, después de un año y medio".

La cara de Blaine parecía amarga antes de arrojar su tazón sobre la mesa, mientras exclamaba fríamente: "Entonces estás diciendo que no te enamorarás de otro hombre y tampoco te enamorarías de mí?".

Ruby se quedó sin palabras.

La mente de ese hombre y su capacidad para tergiversar las palabras era impresionante.

"Nunca he dicho que no vaya a amarte".

Lo único era que sería cuestión de tiempo para que su identidad quedara al descubierto, si se quedaba allí. Cuando eso sucediera, le causaría más daño que bien.

Podía esperar un año y medio por él, pero no estaba dispuesta a esperarlo allí, en esa base militar.

Aunque había estado dispuesto a esperar diez años enteros por ella, era inevitable que descargara sus frustraciones contenidas cuando no recibía la respuesta que deseaba, sobre todo cuando todavía estaba herido por el hecho de que ella se casara con Wilson y sufriera tanto por él. Se sintió ofendido cuando ella expresó su falta de voluntad para quedarse, aunque fuera un poco más de tiempo.

¿De qué otra manera Blaine iba a pensar en ella?

"Entonces, ¿estás dispuesta a morir con Lobo Blanco, pero te sientes mal y quieres disfrutar de la vida ahora que estás aquí conmigo?".

Cada afirmación que hacía era suficiente para herir a cualquiera.

Ruby tiró su pollo al suelo y miró furiosamente a Blaine con sus hermosos ojos brillantes mientras decía: "¿Qué estás tratando de decir, Blaine?".

"¿Realmente no estás segura de lo que quise decir?".

Blaine se fue inmediatamente después de dar unos pocos bocados.

Ruby maldijo mientras se sentaba sola. Estuvo a punto de tirar su plato de sopa por la frustración.

‘¡Maldita sea! ¿Por qué salir con alguien es tan molesto?’.

No tenía las mismas frustraciones cuando quería conquistar a Wilson en aquel entonces.

Se aburrió como una ostra durante todo el día.

Blaine se fue con los soldados después del desayuno.

Ruby se quedó dormida mientras esperaba en la cama durante mucho tiempo.

Cuando Blaine regresó con un estado de ánimo muy frustrado, se dio cuenta de que la mujer dormía en la cama con la cabeza inclinada hacia un lado.

Ruby durmió poco. Se despertó cuando oyó los pasos de Blaine.

En el instante en que Ruby se encontró con la mirada de Blaine, inmediatamente se tapó la cabeza con las mantas, ignorándolo.

Blaine pareció burlarse al quitarse la chaqueta y tirarla en su silla, antes de decirle burlonamente: "¿Pensé que te ibas? ¿Por qué sigues aquí, entonces?".

Ruby no se anduvo con rodeos mientras se quitaba las mantas y decía: "Oh, es cierto, aún no me he despedido de ti".

Ruby se abrazó a su cuello, se acercó a sus orejas y preguntó intencionadamente: "Oh, Blaine, ¿quieres saber cómo fue mi vida de casada con Wilson?".

La mirada de Blaine se sintió fría mientras fruncía más el ceño. Habló con voz grave y forzada: "No quiero saberlo".

¿Iba a contarle lo mucho que se amaban y cómo pasaban su vida sexual juntos?

A Blaine no le interesaba en absoluto saber nada de eso.

Si lo sabía, Blaine no podía garantizar que no se mostrara hostil con el Lobo Blanco, la próxima vez que se encontraran.

Ruby miró al amargado hombre con una mirada divertida mientras preguntaba: "¿Ahora sí?".

El rostro de Blaine seguía amargado mientras no decía nada, ignorándola.

Ruby suspiró mientras se lamentaba: "Qué lástima".

Cuando Ruby terminó de decir eso, se metió de nuevo en la cama y siguió durmiendo.

Mientras Blaine miraba lo despreocupada y sin corazón que estaba, sintió la tentación de impedir que durmiera, así que apartó las mantas y la abrazó inmediatamente.

Ruby le devolvió el abrazo mientras le preguntaba: "¿Qué estás haciendo?".

Blaine le sujetó las muñecas y las mantuvo por encima de su cabeza.

Ruby se quedó sin palabras.

Ruby sacó su mano y abofeteó la cara de Blaine.

"¡Blaine, eres un b*stardo!".

Blaine, que fue abofeteado de repente sin razón, parecía bastante enojado. Levantó las cejas y preguntó: "¿Estás segura de que el b*stardo soy yo y no tú?".

Resulta que en los últimos diez años se reservó para ella, sin tocar a ninguna otra mujer.

Todo se debió a la atrevida afirmación que ella hizo entonces.