Devoción apasionada: la querida esposa del Maestro Fudd romance Capítulo 930

Cherie se acercó apresuradamente para averiguar exactamente lo que estaba sucediendo cuando escuchó la conmoción. Ella fue recibida instantáneamente con la escena de Sherry entrando al río. El nivel del agua ya había alcanzado su cuello.

Sherry no sabía nadar.

“¡Sherry! ¡Sherry!”.

Mientras Cherie estaba llamándola, ella rápidamente llamó al departamento de policía y una ambulancia.

Cuando Boyle ya no podía verlos desde su Spyker negro, él salió del coche y siguió el camino del río para verlos. Sin embargo, pronto fue recibido por los sonidos de pánico de Cherie pidiendo ayuda.

Boyle se sobresaltó e inmediatamente se apresuró a acercarse.

Después de que Cherie terminó de llamar a las autoridades locales, ella quiso buscar una cuerda para salvar a Andy y a Sherry, pero se topó con Boyle.

Boyle sostuvo los hombros de ella y preguntó: “¿Qué sucedió?”.

Cherie respondió con una voz de pánico: “Sherry saltó al río. Ella no sabe nadar”.

Boyle miró hacia el medio del río y notó que el agua ya había inundado las cabezas de Sherry y Andy. Aunque Andy sabía nadar, también estaba siendo jalado bajo el agua.

Boyle habló con un tono calmado: “Quédate aquí y no vayas a ningún lado. Los salvaré”.

Boyle se lanzó al río de una manera muy rápida y fluida para salvarlos.

Sherry apartó violentamente a Andy al medio del río cuando ella agitó sus brazos y se hundió más profundo. Boyle nadó hacia ellos y agarró a Sherry.

Él luego le dijo a Andy: “Sujeta sus brazos para detenerla de moverse tanto”.

Boyle y Andy luego tomaron ambos brazos de Sherry y la sacaron del río.

Sin embargo, el trío había tragado un poco de agua del río, especialmente Sherry, ya que ella había estado completamente inconsciente cuando la arrastraron a la orilla.

Andy se arrodilló a su lado y le hizo algunas fuertes compresiones en el pecho mientras la llamaba: “¡Despierta, Sherry! ¡Sherry! ¡Sherry!”.

Andy le estaba realizando la resucitación cardiopulmonar.

Sherry se despertó e instantáneamente comenzó a toser violentamente, lo que causó que tosiera agua.

Andy la miró con una mirada preocupada cuando preguntó: “¿Cómo te sientes, Sherry?”.

Después de que Sherry terminó de toser agua, ella por fin salió de su trance mientras era abrazada fuertemente por Andy.

Sherry sollozó cuando dijo: “Lo siento… Lo siento…”.

La pareja se abrazó fuertemente.

Cherie se sintió aliviada de ver a Sherry bien mientras dejaba escapar un suspiro de alivio.

La garganta de Boyle se sintió incómoda, ya que él también se estaba atragantando con el agua. Como resultado, él dejó escapar un violento tosido junto a ella.

Mientras Boyle le miraba la espalda, él se dio cuenta de que probablemente se había pasado de la raya cuando le hizo la broma, por lo que él rápidamente caminó junto a ella.

Cherie estaba caminando a un paso muy rápido. Sin embargo, parecía que cuanto más rápido caminaba, más violentos se ponían sus emociones encontradas.

Ella no estaba muy segura de cómo se sentía, ya que comenzó a llorar mientras trataba desesperadamente de limpiar sus lágrimas.

Ella estaba enojada y se sentía extremadamente terrible.

Boyle la alcanzó, le agarró la muñeca e inmediatamente tiró de ella antes de abrazarla con fuerza.

Cherie apretó los puños cuando lo golpeó en el pecho mientras lo fulminaba con la mirada con los ojos furiosos y llorosos. Ella estaba respirando pesadamente y parecía que estaba humeando de la ira.

Boyle realmente no pensó que la haría llorar.

El hombre le limpió las lágrimas con la punta de los dedos y dijo: “Está bien, Cherie. No llores”.

Cherie apartó sus manos y comenzó a limpiarse las lágrimas con la manga.

Boyle le apartó los brazos y habló en un tono suave: “Te lastimarás los ojos de esa manera”.

“¡No es asunto tuyo!”.

Boyle suspiró mientras su corazón se desgarraba, y él la sostuvo por la parte posterior de la cabeza y la miró atentamente. “¿Por qué lloraste?”.