Diario de una Esposa Traicionada romance Capítulo 1001

Felipe retiró su mano, mirando con escepticismo su vientre.

Era evidente que no le creía.

“Eres realmente ingenua, estar embarazada no significa que no puedas…”

“¿No es que querías poner a la familia Elizondo en jaque?”

Leticia lo interrumpió de inmediato, “Deberías saber lo mucho que la familia Elizondo valora a los niños. Cuando Laura estaba embarazada, aunque no la dejaban entrar en casa, realmente apreciaban a su hijo, así que la trataban con mucha consideración.”

“Si este niño te llama ‘papá’, ¿no crees que sería la mejor venganza contra la familia Elizondo?”

“Además, podrías usarlo para controlar a la familia Elizondo.”

Felipe permanecía impasible.

Pero Leticia vio un destello en sus ojos, claramente tentado.

Ella presionó su ventaja: “Por el bien del niño, estoy dispuesta a hacer lo que sea.”

“Este también es un as bajo la manga para ti, no importa cómo lo veas, no vas a perder, ¿verdad?”

Felipe no podía simplemente creer en las palabras de Leticia.

Ander era muy capaz, eso lo sabía muy bien.

“Mira, después de todo el día de estrés, supongo que no te sientes muy bien. Voy a llamar a un doctor para que te revise.”

Leticia se puso nerviosa.

Su periodo acababa de terminar hace unos días, era imposible que estuviera embarazada.

Pero en este momento no tenía otra opción más que recurrir a esta excusa.

¿Qué pasaría si el doctor venía y descubría la verdad?

Pero no llamar a un doctor, definitivamente no le permitiría esconder esto de Felipe.

Ander siempre decía, él era extremadamente desconfiado.

“Eso sería lo mejor.”

Ella trató de mantener la calma, “Siempre he sentido un dolor en el bajo vientre.”

“Espero que el niño esté bien.”

La expresión de Felipe cambió ligeramente, y de inmediato fue a buscar un doctor.

Laura lo detuvo de golpe, “No me digas que te has encariñado con ella.”

“Una mujer que ha estado con tantos hombres, no te da asco.”

Felipe se rió con desdén, “¿Por qué no dijiste que te daba asco antes? Incluso dijiste que me dejabas ir primero porque somos socios, ¿me estabas dando un trato especial?”