Diario de una Esposa Traicionada romance Capítulo 372

Lorena ya no tenía la ansiedad de las noches anteriores, pero sí una ira que disimulaba con una sonrisa forzada mientras decía: "¿No se supone que el informe saldría hoy? ¿Dónde está?"

"En un momento." Camilo soltó esas dos palabras.

Lorena me miró con una sonrisa burlona y luego dijo: "Señorita Coral, una vez que el informe se publique, solo tengo una exigencia para ti: ¡no vuelvas a poner un pie dentro de nuestra casa, ni cerca de la familia Monroy! ¡Has traído puro desorden!"

"¡Cállate!"

Fabiola le reprendió a Lorena severamente y luego me dio una mirada tranquilizadora: "Cloé, no te preocupes, yo estoy aquí contigo."

"Gracias, Fabiola."

Al oír esas últimas palabras, sentí un alivio inexplicable. Como si, no importa lo que sucediera, nunca estaría sola en eso. Incluso aunque realmente fuera Vanesa y realmente volviera a la familia Monroy, al menos tendría a mi abuela.

Lorena se rio con desdén y luego dijo: "Fabiola, no pierdas tu energía en este teatro de abuela y nieta, ella no puede ser Vanesa."

"¿Tan segura estás? ¿Ya conoces el resultado?" Camilo habló con un tono ligeramente confundido.

Lorena rápidamente negó: "¡Yo, cómo podría saberlo!"

"Oh, ya veo, el análisis se realizó en el Hospital Bellavista, y aquí estás tú, sabiendo más que yo." Camilo sonrió despreocupadamente, pero parecía tener todo bajo control.

Lorena, temiendo ser atrapada en otra inconsistencia, solo se apuró a preguntar: "¿Ya viene el informe?"

Justo después de su pregunta, un joven entró.

Le entregó dos documentos a Camilo diciendo: "Señor Galindo, el director mismo me los dio, no han pasado por otras manos."

Al escuchar eso, el ambiente en la sala se volvió más tenso.

Lorena, por su parte, no insistió en ver el informe inmediatamente y solo esperó a que Camilo lo leyera. Cuando Camilo terminó de leer el primero, su expresión no cambió, pero al ver el segundo, su rostro se endureció.

Siempre tenía una actitud relajada, pero verlo con el ceño fruncido era realmente intimidante.

"¿Qué quieres decir?" Preguntó Lorena.

"Olvidé mencionarlo," Camilo habló con calma: "Esta vez, el análisis de paternidad se dividió en dos partes, una realizada por el hospital de la familia Galindo, y la otra fue enviada al extranjero la noche anterior por un avión privado, para ser procesada por una institución internacional."

"¿Qué?" Al oír eso, Lorena y Abril ya no pudieron mantener la calma.

Abril se levantó de un salto preguntando: "¿Quieres decir que el resultado del análisis del extranjero es diferente al de hoy?"

"Pregúntale a tu madre." La voz de Camilo llevaba un tono naturalmente desenfadado.

Esas cuatro palabras, eran tanto como una respuesta como una ofensa.

Fabiola extendió la mano y el mayordomo recogió los dos informes del suelo, entregándoselos a la matriarca. Después de leerlos, miró fijamente a 'Vanesa' con una mirada aguda y comenzó a dar órdenes al mayordomo.

"Envíenla al cuarto donde recibimos a los visitantes, asegúrense de que esté bien vigilada. Y limpien... limpien bien el cuarto de Vanesa, desinféctenlo por completo. A Vanesa le gusta la limpieza, no soporta que extraños toquen sus cosas."