Diario de una Esposa Traicionada romance Capítulo 592

Fruncí el ceño, "¿Es grave?"

"No es grave, pero por eso, no pude proteger bien a la matriarca."

Al escuchar esto, supe que Martina no había venido sola.

Pero esta vez, no estaba manipulando todo desde las sombras, sino que tomó acción personalmente, lo cual no esperaba.

Miré fijamente a Martina, "Mandaré a alguien por Abril, ¡primero suelta a mi abuela!"

"¿Crees que tienes el derecho de negociar conmigo?"

Martina se veía completamente segura de sí misma.

Mi abuela parecía desanimada, sin mostrar resistencia alguna, simplemente siendo controlada por Martina.

No pude evitar dudar, "Si le has dado veneno a mi abuela otra vez, te aseguro, tu final será terrible."

Martina no se intimidó por mi amenaza, e incluso soltó su agarre a propósito.

Cuando mi abuela tambaleó, mi corazón casi salta de mi pecho.

"¡Abuela!"

Miré a Martina con furia, apretando los dientes, "¡Atrévete a soltar y te aseguro que Abril tampoco la pasará bien!"

Martina se rio descaradamente, "Aparte de amenazarme verbalmente, parece que no tienes otra habilidad."

En ese momento, realmente no tenía otra opción.

No podía contactar a Camilo.

Tampoco sabía dónde estaba Abril.

Si Martina decidiera ser más cruel y no le importara Abril, podría empujar a mi abuela.

No me atreví a pensar en lo que seguiría, "Ahora llamaré a Camilo para que traiga a Abril."

Saqué mi teléfono mientras advertía, "¡Asegúrate de sostener a mi abuela!"

Pero la llamada se cortó sin respuesta.

Cuanto más sucedía esto, más inquieta me sentía, sin saber si algo problemático había sucedido también del lado de Camilo.

Si él también había tenido un accidente.

"¡Cloé!"

Leticia regresó después de vendar sus heridas, intentando disculparse al verme.

Sacudí la cabeza, viendo su palidez sabía que la herida no era leve.

En comparación con ella, yo debería sentirme más culpable por haberla involucrado.

En ese momento, no tenía la mente para preguntar cómo Martina había entrado de repente, solo suprimí las diversas preocupaciones en mi corazón y rápidamente dije: "Leti, llama a Ander ahora mismo."

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