Diario de una Esposa Traicionada romance Capítulo 796

En la habitación del hospital, Ander pelaba una naranja para Leticia.

Ambos habían permanecido en silencio toda la mañana.

Pero, de alguna manera, todo estaba dicho.

Ander pelaba las naranjas con cuidado, quitando también los hilos blancos.

Se las daba a Leticia una a una.

Después de terminar con una naranja, le daba un poco de agua.

Entonces, finalmente habló: "¿Qué te gustaría comer? Iré a comprártelo."

Leticia no podía mover la cabeza, solo movió la mano en señal de negativa: "Mejor vuelve a casa."

"..."

Se miraron por un momento, Ander se levantó y se inclinó para besarle la frente.

"Lo siento."

Leticia extendió su mano para abrazarlo, dándole palmaditas en la espalda, "No deberías disculparte."

"No es por lo de Laura."

Entonces, tenía que ser por lo que dijo Maite.

Leticia lo entendió y preguntó: "¿Estabas en la puerta cuando vino tu abuela?"

"Sí."

"Así que lo escuchaste todo."

"Sí."

Ander la abrazó con ternura, pero en el siguiente momento apretó los brazos, como deseando fundirla en su ser.

"Ya les dije a ellos también, que estoy contigo en esto."

Leticia soltó una risa, "Con eso me basta, ahora vuelve a casa."

"No vuelvas hasta que lo hayas resuelto."

Ander la soltó, acomodando su almohada y cubriéndola bien con la manta.

"Descansa bien, vendré a verte en cuanto pueda."

"Está bien, ahora ve."

Ander se marchó, mirando hacia atrás a cada paso, tardando una eternidad en recorrer la corta distancia hasta la puerta.

Leticia se volteó, dándole la espalda, y se limpió una lágrima.

Ander salió por la puerta.

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