Diario de una Esposa Traicionada romance Capítulo 844

Camilo escudriñaba su semblante con atención.

Aunque su rostro rara vez mostraba algún cambio significativo, siempre sereno, incluso cuando esbozaba una sonrisa, era más tenue que la de los demás.

Él entendía y adivinaba los cambios en su ánimo.

"Ya te comprometiste a casarte conmigo, ¿no deberías estar brindando de alegría conmigo en este momento?"

"¿A qué vienen todos esos aires de preocupación que te rodean?"

Ander apagó su cigarrillo en el cenicero.

Se levantó, tomó la botella entera, llenó su copa y la vació de un trago.

Camilo arrastró una silla y se sentó frente a él.

Jugando descuidadamente con su copa de vino, dijo: "Sería mejor que bebieras despacio, si terminas vomitando, no pienso cuidarte."

"No hace falta." Ander respondió con una frase helada, y bebió directamente de la botella.

"..."

Camilo se pasó la mano por la ceja y añadió: "Si terminas inconsciente por el vómito, llamaré a una mesera para que te bañe y te cambie de ropa, y luego le mando unas fotos a Leticia para que vea."

Ander puso la botella sobre la mesa de café con fuerza.

Camilo no dejó de mover su copa, y con una actitud despreocupada dijo: "Ahora solo puedes desquitarte conmigo."

"Considerando nuestra amistad, te diré algo a regañadientes."

"Mi esposa me dijo que Leticia ni siquiera te preguntó por la boda," hizo una pausa a propósito, y luego añadió con énfasis, "No le importa en absoluto."

"..."

Desde que Laura lo manipuló, Ander estuvo constantemente enfadado.

Se sentía como si pudiera enfermarse de cáncer de tanto coraje.

"No creo que me consideres un hermano."

Ander contestó molesto, "Eres un esclavo de tu esposa."

Camilo lo tomó como un elogio, "Sí, lo soy. Tú no puedes casarte, no entiendes este tipo de felicidad."

"..."

Después de que este tipo se casó, Ander sintió que ya no podía comunicarse con él.