Diario de una Esposa Traicionada romance Capítulo 950

Por un capricho del destino, terminamos juntos otra vez, así que esta vez, decidí seguir adelante con Ander, sin importar quién o qué, nada nos separaría.

Hizo una pausa, cambiando el tono, "Eso es todo lo que tengo que decir."

Justo cuando iba a sentarme, Maite habló y me enderecé de inmediato.

Pero Ander me atrajo hacia abajo para sentarme.

Estaba algo nerviosa, y Maite dijo, "Habla sentada, no somos tus jefes ni tus mayores, no es necesario que te pongas de pie como si estuvieras reportando al trabajo o mostrando un respeto absoluto."

Parece que todavía no lo aceptan.

Leticia no replicó.

Maite preguntó: "¿Realmente amas a Ander?"

Leticia respondió sin dudar, "Sí, lo amo."

Una sonrisa cruzó los ojos de Ander, quien le sirvió un plato de sopa.

"No quieres comer, al menos bebe algo para calentar el estómago."

Maite estaba hablando con ella, ¿cómo podría Leticia beber tranquilamente?

"Hoy es una cena familiar," Ander la consoló, "no es una inquisición, así que come algo."

Sabía que Ander se preocupaba por ella; siendo ella la única extraña en su familia, él definitivamente la protegería más.

Pero cuanto más hacía esto, más creían los Elizondo que Ander no tenía límites por ella.

No era bueno.

Eso solo alimentaba su deseo de separarnos.

Estaba a punto de hacerle una seña a Ander cuando Maite habló: "Ander tiene razón, debes comer algo, bebe la sopa."

Solo entonces Leticia bebió la sopa.