DOCTORA DE DÍA, MADRE SOLTERA DE NOCHE. SERIE LOVE MEMORY. romance Capítulo 65

65 /127

65 UNA MALA NOTICIA

FARID ARAY

Rara vez me dolía la cabeza, pero esta mañana sentía que me podía estallar el cerebro. Molesto conmigo mismo por idiota y por dejarme manipular por la vieja bruja que tendré como suegra, conduje de regreso a casa.

No tengo mucho que hacer hoy y eso hace que siga pensando en las idioteces que soltó Mara para desprestigiar a su hija ante mis ojos. Camil podrá tener cualquier defecto, «el mayor obviamente apoyar a la arpia»; pero si de algo estoy seguro, es que esa mujer es mía. Camil me pertenece en cuerpo y alma, y ni el peor ardid de su madre cambiaria esa convicción.

Trátate de concentrarme en mis pendientes, y después de llegar a casa realizaría una lista de llamadas. Tenía varias cosa que arreglar, pues a pesar de no estar presente, no puedo dejar acumular trabajo.

Hace varias semanas que no pongo un pie en Arabia Saudí y en cualquier momento será imperativa mi presencia por algunos días, solo que no quisiera alejarme de mi mujer ni de mi hija con Mara dando vueltas a nuestro alrededor.

La presencia de esa bruja ya de por si me pone los pelos de punta, así que dejar solas Camil no es una alternativa ahora mismo. Necesito que Camil se sienta respaldada y querida, para que la lengua afilada d eso madre no haga mella en su autoestima. Tampoco nunca dejaría que mi Emira se quede a solas con su abuela materna, en carne propia viví lo cruel que es capaz de ser la endemoniada vieja con un niño de seis años. Bastantes heridas cargó en mi subconsciente Gracias a los castigos inhumanos que me impuso, y a mi hija jamás la expondría a algo semejante, aunque eso signifique alejarla de todo lo que conoce para estar fuera del alcance de su abuela.

Aparqué el auto en el garaje lateral de la casa, y entré aún distraído. Pensé en cambiarme para ir al gimnasio para aplacar un poco mi molestia y mi ansiedad, pero antes tenía que salir de los asuntos relacionados con las empresas fuera del país. Debido a la diferencia horaria tenía que aprovechar la mañana para ponerme al día con mis colaboradores.

Camino al despacho que tengo en la Mansión y me senté aún algo enajenado y con la mente perdida en el pasado. La m*****a vieja esquizofrénica había logrado molestarme. Mara debería estar aislada en un hospital psiquiátrico con una camisa de fuerza asegurada con siete candados, que no le permita hacerle daño a nadie.

Una llamada entrante me obliga a dejar mis cavilaciones, así que saco mi celular de mi bolsillo.

—¿Farid?¿Estas solo? ¿puedes hablar o está mi hermana contigo? — preguntó una voz que reconocí rápidamente como la de Liam. El hermano de Camil, mi único primo y casi un hermano para mi. Él y mi tío eran mis únicos familiares vivos hasta que Camil reapareció en mi vida con mi tesoro de pelo negro.

—Estoy solo Liam— respondí tomando asiento tras el sillón del escritorio—¿Ocurrió algo?— pregunté con muy poca sutileza, el pesar en su tono me decía que si, pero mejor no adelantarme a los acontecimientos. Así que mejor tomar las malas noticias sentado.

—Tenemos un problema con el testamento de tu padre. Mi padre me acaba de informar que un viejo socio de tu padre está reclamando los derechos del terreno que estamos explotando en el Golfo Pérsico.

—Nunca vi ese terstamento. Siempre supuse que yo era el heredero universal, y eso me lo confirmó tu padre cuando llegue a la mayoría de edad—Hice una pausa pensado en las posibles connotaciones que podía traer ese litigio para mi empresa, luego de unos segundos volví a hablar— ¿Precisamente ese terreno?— pregunté comenzando a preocuparme— Liam, la extracción de crudo de nuestras empresas ahora mismo está concentrada en un noventa por ciento en esa área. Además de que nuestra mayor refinería está en el Golfo pérsico cercana a los campos de extracción . Si perdemos esa área perderemos el poder sobre la compañía.

—Atenea opina los mismo—me informó Liam —. Estoy aquí ahora con el mejor abogado mercantil de mi despacho, y mi esposa está viendo que puede hacer para detener la venta de Laos paquetes de acciones libres que estaban a la venta en al bolsa.

—No creo que se pueda hacer mucho, esas acciones solo representan un diez por ciento en el directorio— le expliqué a mi primo pasándome la mano por la frente. La misma Atenea me había ayudado a montar una administración bastante cerrada, para que el grueso de la participación en acciones quedara en manos de la familia.

—Creo que será menor que vengas a Los Ángeles Farid— propuso Liam con la voz también cargada de preocupación. — Nadie conoce los negocios del petróleo y de la minería como tú, y papá desea hablar contigo a cerca del testamento y de los posibles planes de contingencia para solucionar esta crisis. Según veo todo está en tus manos.

—Liam…¿Pero quién es este socio de mi padre? — inquirí poniéndome de pie. Me había criado en Estados Unidos, así que desconocía los términos en que mi padre había prometido las propiedades de una tierra tan prospera. Si bien las parcelas del Golfo se habían comenzado a explotar hacía apenas diez años, se sabía que el yacimiento de petróleo de la zona superaba la de los pozos que teníamos en extracción anteriormente.

—Será mejor que vengas Farid. Creo que podrías desmayarte cuando sepas cuales son los términos del testamento de tu padre, y que a mi padre no le paso por la mente contarte.

—Tengo que recoger a la niña en la escuela esta tarde—expliqué pensando en llamar a Camil para que ella se encargara de Emira por el resto del día. Si el tema era tan serio como advertía Liam, estaba en una terrible disyuntiva. Tendría que alejarme por unas horas de Atlanta, que era justamente lo que menos deseaba hacer en este momento.

—No traigas a la niña Farid— aconsejo mi primo— me temo que enloquecerás esta noche o te resignarás a perder tu trabajo de los últimos años. Porque todos en la familia sabemos que la mente maestra de ese negocio eres tú, desde la ingeniería, la exploración y explotación exitosa del campo de petróleo ha sido Gracias a tu destreza como ingeniero geólogo.

—Me estás asustando con tanta intriga Liam— le informe a mi primo amasando mi nuca con la mano libre. Podía sentir la tensión invadiendo mi cuerpo.

—Deberías estarlo Farid… por que yo lo estoy— agregó él y percibí la sonrisa triste que soltó después. —Te aconsejó que te metas en ese avión y vengas lo antes posible.