El Amor Eterno romance Capítulo 1394

Lucas se tomó un largo momento para pensar y le preguntó a Zachary si yo era feliz...

Para ser honesta, me sentí avergonzada y conflictiva en el fondo. Ambos hombres estaban discutiendo sobre mí, y yo me sentía fatal por estar en medio.

Zachary siguió provocando a Lucas. "Ella es mi esposa. Es la madre de mis dos hijos. ¿Por qué crees que no es feliz?".

Lucas dijo en tono grave: "Me estás provocando".

Zachary le respondió con una pregunta. "Si no, ¿deseas verla sufrir más en la vida? ¿Es ese tu amor por ella? Nébula, después de todo, eres...".

Zachary se dirigió hacia el taburete de metal y se sentó. De repente, se burló: "No eres más que un cobarde. ¡No eres más que un cobarde que se lame su propia herida en la oscuridad!".

Lucas se puso un poco nervioso y parecía asustado. ¡Inmediatamente después, su expresión se volvió viciosa!

Rápidamente se dirigió a Zachary y le dio un fuerte puñetazo en la cara. El anillo en su dedo cortó la cara de Zachary. La mejilla de Zachary sangraba.

Mi corazón temblaba. Rápidamente agarré el brazo de Orpheus y le insinué que pensara en alguna manera de detener esto. Sin embargo, Orpheus me dijo en voz baja: "¿Cómo me voy a atrever?".

Así es. Nadie se atrevería a persuadir a Lucas en ese momento.

Zachary no era un hombre que simplemente permitiera que otros lo intimidaran. En el momento en que Lucas le dio un puñetazo, se defendió rápidamente y le dio un puñetazo en la cara a Lucas. Los dos hombres de repente se estaban peleando. Al final, Zachary seguía en desventaja porque estaba atado con la cadena.

Lucas quería volver a golpear la cara de Zachary. Al mismo tiempo, me apresuré a llamar a Lucas.

"Señor".

Lucas detuvo su ataque y me miró.

Sus ojos mostraron que su mente estaba hecha un desastre. Tal vez, no estaba seguro de por qué de repente se enfadó tanto.

"Señor, está herido", le dije.

Lucas dejó de atacar a Zachary y se levantó. Se dirigió a la posición anterior de Zachary con una expresión perdida. Luego, levantó la cabeza y se quedó mirando el tragaluz del techo.

Últimamente, había aprendido mucho sobre los hábitos de Lucas. A grandes rasgos, me di cuenta de que acababa sumido en unos cuantos minutos de pensamientos cuando se despistaba.

Oculté mis preocupaciones y la angustia en mi corazón. Entonces, me dirigí al lado de Zachary con pasos ligeros y lo ayudé a levantarse.

De repente, el hombre extendió su mano y me sujetó la cabeza. Me besó intensamente y su aliento me envolvió de inmediato. Mis ojos se abrieron de par en par, sorprendidos, mientras él me miraba fijamente. El rabillo de mis ojos estaba un poco lloroso. Me limpió las lágrimas con sus largos y delgados dedos.

Mi corazón temblaba de preocupación. Zachary hizo todo lo posible por utilizar su beso para reconfortarme.

Zachary no quería que estuviera triste. No quería que lo lamentara.

Finalmente, me dejó ir después de un rato.

Zachary limpió suavemente las manchas de sangre que había dejado en mi cara. Me dio pena y le acaricié la mejilla. Justo cuando quería volver a abrazarlo, Orpheus se acercó de repente y tiró de mí para que recuperara la compostura.

Medio minuto después, Lucas dijo: "Deberías morirte".

Zachary hizo una mueca y se limitó a ignorarlo.

En ese momento, Lucas movió sus largas piernas y abandonó el lugar. Orpheus tiró de mí para que lo siguiera. Me volví y le dije a Zachary: "Espérame".

Tenía que buscar la manera de salvarlo.

Después de salir del almacén, el estado mental de Lucas era visiblemente malo. Cerró los ojos todo el tiempo después de subir al coche. El coche condujo unos dos minutos, y me quité rápidamente el reloj de pulsera y bajé la ventanilla del coche. Entonces, con mucho miedo, ¡deje caer mi reloj!

Me quedé sorprendida. Pregunté: "¿Por qué no lo dijiste antes?".

"¿Quién hubiera esperado que los dos hicieran algo como eso?".

Aunque fui yo quien se acercó primero a Zachary, fue éste quien inició el beso. Era de esperar que no estuviera al tanto de las cámaras de seguridad dentro del almacén. Sin embargo, era poco probable que Zachary no lo sospechara. Llevaba días allí, así que debía conocer la ubicación de las cámaras.

Aun así, decidió besarme. De repente entendí la intención de Zachary.

En primer lugar, quería consolarme porque no quería verme triste.

En segundo lugar, quería que Lucas descubriera mi verdadera identidad.

Una vez que Lucas descubriera mi identidad, nunca me haría daño. Sin embargo, ¡eso solo pondría a Zachary en una posición peligrosa!

¡Ese hombre, Zachary!

Él realmente nunca se consideró a sí mismo primero. Desde el principio hasta el final, hizo todo lo posible y siempre consideró las cosas por mi bien.

Mi corazón se estremeció de dolor al pensar en ello. Me dolía mucho el pecho. Me puse en cuclillas y pregunté: "¿Qué debo hacer ahora?".

"Ya que hemos llegado a este punto, ¡tienes que sacarlo del peligro!".

Me confié y dije: "¿No me ayudarás?".

"Claro que no. No somos tan cercanos".

Bien. ¡Aquí es dónde entra en acción el reloj de pulsera!