El Amor Eterno romance Capítulo 149

En mi sueño, yo estaba sola.

Yo estaba en un espacio vacío.

En este espacio, yo estaba sana, yo no tenía que preocuparme por nada. Fue como viajar a los viejos tiempos.

Yo corrí con felicidad por este espacio vacío. Seguí corriendo hasta que entré en un área en donde encontré una figura masculina, fuerte y firme, puesta de espaldas a mí.

Me detuve y pregunté con curiosidad, "¿Quién eres tú?".

Miré más allá y el espacio vació detrás de él de repente se convirtió en un espacio lleno de miles de estrellas. Sus ojos brillaban con luces.

Él era extremadamente guapo, el hombre más guapo que había conocido. Era como un ser legendario, que me atraía en absoluto.

Porque yo era una persona ordinaria.

Me gustaba la gente ordinaria, de carne y piel.

Sonreí y volví a preguntar, "¿Quién eres tú?".

Él suavemente me llamó. "Bel".

Bel…

Su voz, la voz que me llamaba Bel, no tenía emociones.

El hombre tenía un corazón frío.

Yo le corregí, "Soy Caroline Shaw”.

Él frunció los labios y permaneció en silencio.

¿Estaba él sonriendo?

…

Yo estaba en el hospital cuando desperté. Solo Yair estaba a mi lado. Dudé y le pregunté, "¿Es esta la Ciudad Tong?".

De manera respetuosa, él dijo, "Sí, Sra. Shaw".

Me levanté y pregunté, "¿Cuánto tiempo estuve dormida?".

"Contando hoy hace nueve días".

Yo estaba sorprendida y me levanté. "¿No estoy muerta?".

Mi cuerpo estaba muy débil y, aún así, ¡¿logré sobrevivir?!

Negué con la cabeza. "¿Dónde está Zachary?".

"El Sr. Schick está en el exterior por asuntos de negocios".

Por lo que significaba que no estaba en la Ciudad Tong.

No me sentí decepcionada, pero había muchas cosas de las que tenía que preocuparme. En ese momento, yo estaba reacia a volver a la Ciudad Wu.

El asistente me dio la medicación que realmente podría tratar mi cáncer y me ordenó, "Sra. Shaw, recuerde tomar el medicamento a tiempo”.

Lo acepté y dije de manera agradecida, "Gracias".

"Sra. Shaw, usted necesita descansar un tiempo, ya que acaba de someterse a una cirugía. Aunque el Sr. Schick no había dado órdenes específicas, todavía espero que usted permanezca en el hospital”.

Zachary realmente aparecía de la nada y desaparecía como él quisiera.

Desde el principio hasta ahora, rara vez hemos hablado.

Pero él realmente me trató bien.

Me puse curiosa y le pregunté a Yair, "Yair, ¿por qué estaban ustedes en la iglesia ese día?".

Luego, hice una pausa y fruncí los labios. "¿Zachary fue solamente por mí?".