El Amor Eterno romance Capítulo 1506

Simplemente quería que él fuera feliz. Después de todo, la vida de Lucas siempre había sido triste.

"Señorita, gracias por sus amables deseos".

Lucas apartó la mirada del mar rugiente. Desplazó su mirada hacia mí.

Me miró dulcemente, y parecía ligeramente frío bajo la suave luz de la luna que lo iluminaba.

Me miró durante mucho tiempo antes de decir finalmente: "No es como si tuviera que dejarte en paz. Siento que es mejor si me alejo de tí. Después de todo, tú tienes tu propia vida y yo tengo la mía. Es suficiente siempre y cuando sepa que eres feliz. Solo quiero sentirme tranquilo, es lo que más deseo. Señorita, por favor, volvamos al estado en el que simplemente éramos desconocidos".

Si volviéramos a cuando éramos extraños, no nos preocuparíamos el uno por el otro incluso si nos volvieramos a ver. ¡Ya ni siquiera podríamos cuidarnos el uno al otro como una familia!

Mis ojos se llenaron de lágrimas cuando dije: "Te lo prometo".

“Señorita, a partir de ahora, tienes que hacer juicios de acuerdo a tu corazón durante el resto del viaje. Nadie te culpará sin importar las decisiones que tomes".

Le pregunté preocupada: "¿Qué quieres decir con eso?".

Lucas no me respondió y simplemente regresó al vestíbulo.

Permanecí de pie en la cubierta mientras la frustración crecía dentro de mi. Finalmente me refresqué un poco cuando sentí la brisa del mar.

Comprobaba la hora de vez en cuando mientras estaba prediciendo la llegada de Tucker. No mucho después, escuché algunos tintineos familiares detrás mío. Me sonó muy familiar, pero no vi a Lucas cuando me di la vuelta.

De repente, entré en pánico y regresé al vestíbulo de inmediato. Zachary dijo que sus hombres me protegerían en el vestíbulo.

No podía convertirme en una carga en un momento tan crucial.

Todo se sintió extraño después de que volví al vestíbulo. Sentí que la campana seguía tintineando en mi cabeza. Se sentía como si alguien siguiera hablando junto a mi oído, pero no podía escucharlo con claridad.

Yara me arrastró para seguir jugando. Finalmente usé todas las cartas de juego en mi mano, pero todavía me quedaban cuatro estrellas. Le di la estrella adicional a Seychelles.

Se me consideró exitosa en las rondas del juego, pero solo podía haber un ganador entre los tres de nuestro equipo. Solo uno de nosotros podía ganar.

Quería quedarme allí y esperar obedientemente a Zachary. Sin embargo, los tintineos de las campanas sonaban constantemente en mis oídos. Escuchaba una voz muy familiar, como si Lucas estuviera a mi lado...

Le pregunté a Yara: "¿Escuchaste algo?".

Yara me preguntó con curiosidad: "¿Qué cosa?".

"¿El sonido de las campanas tintineando?".

Ella me miró curiosa y preguntó: "¿Lucas Moore?".

¡¿Qué tenía que ver con Lucas?! Sin embargo, el tintineo de las campanas sonaba tan familiar.

"Yara, mi mente está hecha un desastre".

"Caroline, no he oído ningún ruido".