Resumo de Capítulo 1695 – Capítulo essencial de El Amor Eterno por Internet
O capítulo Capítulo 1695 é um dos momentos mais intensos da obra El Amor Eterno, escrita por Internet. Com elementos marcantes do gênero Romance, esta parte da história revela conflitos profundos, revelações impactantes e mudanças decisivas nos personagens. Uma leitura imperdível para quem acompanha a trama.
Le contesté: "Gracias".
Llevé el algodón de azúcar de vuelta al restaurante. Sorprendentemente, vi a una persona sentada frente a Zachary. Me pareció conocer a esa mujer.
Efectivamente, la había conocido antes, pero no recordaba quién era en ese momento.
No volví a mi asiento inmediatamente. En cambio, me senté detrás de Zachary y escuché a la mujer hablarle con un tono triste.
"Sé que ya estás casado, pero todos estos años...".
Hizo una pausa y preguntó: "¿Has estado bien todo este tiempo?".
Zachary respondió vagamente: "Sí".
"Todavía recuerdo cómo te gustaba dormir sobre la mesa. Lo hacías todos los días, como si no durmieras lo suficiente. Parecía que estabas muy cansado en esa época. ¿Qué hacías entonces?".
Me acordé de ella. Conocí a esa mujer con Zachary cuando visitamos su escuela secundaria hace algún tiempo.
Olvidé su nombre, pero Zachary me dijo que ella había estado enamorada de él, pero siempre fingía no ser consciente de ello.
Zachary le contestó con indiferencia: "Lo había olvidado".
La mujer se quedó ligeramente atónita y triste al escuchar su respuesta. Siguió hablando con Zachary y dijo: "Siempre he querido preguntarte algo todos estos años. Si hubiera sido más valiente entonces...Ya sabes lo que quiero decir. Me pregunto si ese joven muchacho habría correspondido a mis sentimientos. Solo puedo fantasear con que todavía haya esperanzas para mí. En ese entonces, era un cobarde. Me gustabas, pero no me atrevía a acercarme a ti".
Aquella mujer parecía normal, pero tenía un gran temple. Había sido compañera de clase de Zachary cuando éste era joven.
Zachary permaneció en silencio tras escuchar su pregunta, y la mirada de esa mujer cayó decepcionada. Preguntó: "No hay ninguna esperanza, ¿verdad?".
"Pues no".
La fría respuesta de Zachary fue directa y cruel. La expresión de la mujer cambió drásticamente, y parecía avergonzada. Fue como si el amor secreto y la débil esperanza a la que se aferró todos esos años se derrumbara en un instante.
"Lo siento. Te he vuelto a molestar".
Zachary guardó silencio poco antes de responderle con su fría voz.
Preguntó: "¿Cuándo llegaste?".
"Hace un momento. Escuché su conversación", dije.
Zachary explicó: "Es una persona muy decidida. Es muy persistente con las cosas y personas que quiere. Tuve que decir todo eso porque no quería que pensara que su persistencia de todos estos años era algo de qué burlarse".
"No tienes que explicarme. Lo entiendo".
Zachary tenía buen corazón, pero lo ocultaba bajo su frialdad.
No muchos lograban darse cuenta de su amabilidad.
Zachary sonrió ligeramente, parecía estar contento.
Entrecerré los ojos y le pregunté: "¿Te cautivé cuando nos conocimos?".
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