El Amor Eterno romance Capítulo 1791

“Hermano, ¿puedes prometérmelo por favor?”.

Era un gran día soleado en Ciudad Wu.

Isabelle Schick abrazó el brazo de Raphael Schick y apoyó la cabeza en su hombro mientras actuaba como una bebé.

Ella instó: “Hermano, odio estudiar. ¿No puedes ayudarme? ¡Por favor, te lo ruego querido hermano!”.

Isabelle siguió frotando su cabeza contra el hombro de Raphael. Él era al menos una cabeza más alto que ella. Debido a la pequeña figura de ella y su postura íntima con su hermano, otros fácilmente los confundían con una pareja si los veían de espaldas.

“¡Oye! ¿Qué están haciendo ustedes dos?”.

Isabelle se dio la vuelta y vio que era su maestra de clase.

Ella exclamó inocentemente: “¡Estamos tomados de la mano!”.

“¡La escuela no permite que los estudiantes tengan relaciones!”.

Al escuchar eso, Isabelle rápidamente abrazó el cuello de Raphael.

Raphael la miró con ojos impotentes y sin palabras.

Isabelle saltó sobre Ralphael y dijo: “¡Yo tampoco quiero estar así, pero este chico de aquí es demasiado guapo!”.

La maestra de la clase se enojó mucho por su actitud.

“¡Traeré a sus padres a la escuela!”.

Ese día, un Lincoln negro extralargo entró en la escuela y se detuvo justo debajo del complejo de la escuela. La ceja de la maestra se levantó un poco al ver a una hermosa mujer salir del coche con un hombre guapo.

Ella se aferró al hombre mientras bajaban del coche. La mujer estaba vestida a la moda, y se veía extremadamente joven. ¡Si tuviera puesto un uniforme, otros la habrían confundido con una estudiante!

Isabelle le presentó a la maestra de la clase. “Esta es mi mamá”.

La que dijo eso fue Amaya Stone, la hija de Elaine Stone. Amaya e Isabelle eran mejores amigas.

Isabelle sonrió hermosamente y dijo: “No lo hará. Mi querido hermano Ralph está en Noruega. Si digo que voy allí a buscar a Ralph, no se opondrá. Además, me convertiré en una adulta legal en tres meses. ¡Ya completé la misión que papá me dio! ¡Él estuvo de acuerdo en que podía viajar!”.

Isabelle era una niña brillante. Se había unido a la clase de prodigios de Zachary a una edad temprana. Por alguna razón, Caroline sintió que Isabelle era como Yara. Sin embargo, ella no era tan seria como Yara. Ella era demasiado traviesa y problemática. Solo Zachary podía controlarla. Isabelle le temía mucho a Zachary. Después de todo, ella era diferente a Cedar y Raphael.

Ella creció junto a Zachary desde una edad temprana. Fue su padre quien le enseñó todo lo que sabía, incluso a tocar el piano. Su madre incluso dijo que su padre no se convirtió en un profesional sino hasta un tiempo después. Fue ella quien le enseñó todas sus habilidades de piano. Aun así, Isabelle sintió que su padre tocaba el piano mejor que su madre.

“Haz lo que quieras. Me iré”.

Isabelle no se molestó, y se despidió de Amaya con naturalidad. “No te preocupes. Tu mejor amiga, Isabelle la Leoncita, te traerá recuerdos”.

“Como sea, no dejes que tu vecino te engañe de nuevo”.

El vecino que Amaya mencionó era Nash Stevens. Era el vecino de Isabelle, que había crecido junto a ella. A Isabelle siempre le había gustado mucho, pero era principalmente por su buena apariencia.