El Amor Eterno romance Capítulo 1929

Después de eso, Isabelle enfatizó deliberadamente: “He estado aprendiendo a pelear desde que era joven, así que tengo mucha fuerza. No pude controlar mi fuerza cuando te pateé y me asusté después de lo que hice. Tenía miedo de que me golpearas, así que rápidamente me escapé”.

Miles de repente perdió su arrogancia, después de enterarse de que ella había aprendido a pelear. Al principio quería vengarse, pero se asustó porque no podía pelear con ella.

Sería aún más vergonzoso si dejaba que otros los vieran pelear más tarde.

“¿Cuál es tu nombre?”, preguntó Miles.

El nombre de Isabelle Schick aún no era muy conocido. Aun así, la mayoría de las personas que conocían a la familia Schick sabían que el nombre de la hija menor de la familia era Isabelle.

Isabelle realmente no quería darle su nombre. Además, avergonzaría a su familia si causara más problemas más tarde.

“Todos me llaman Leoncita”, se presentó ella.

Tom suspiró en secreto cuando escuchó a la joven Señorita presentarse con su apodo. Estaba seguro de que había un noventa por ciento de posibilidades de que se metería en problemas más tarde.

La voz de una chica de repente vino desde atrás.

“Hermano Miles, ¿qué estás haciendo aquí? ¿Quién es esta chica? Dijiste que una chica hermosa te pateó al lago anoche. ¡¿Es ella?!”.

¿Ella estaba elogiando la belleza de Isabelle?

El estado de ánimo de Isabelle mejoró, y respondió: “No lo hice a propósito”.

“¿Por qué estás tan feliz?”.

La chica notó algo extraño acerca de ella y preguntó: “¿Quién eres?”.

“Una pariente muy lejana que no tiene nada que ver con la familia Yach”.

La chica frunció el ceño. Ella estaba desconcertada, y preguntó: “¿Realmente tenemos un pariente como tú en la familia Yach? Hermana Mayor, mírala. ¿La conoces?”.

Isabelle se dio la vuelta y vio a Dahlia.

Tom le susurró a Isabelle: “Estos son los tres hermanos de la familia Yach”.

Por alguna razón, accidentalmente volvió a escucharla a escondidas. Y a juzgar por lo que ella dijo…

“¿Es ella la preciosa hija de la familia Schick?”.

El asistente respondió: “No le prestamos mucha atención, pero debe ser fácil conseguir su foto. A juzgar por lo que dijo, debería ser Isabelle Schick. Además, se refirió a Cedar como su Hermano Mayor”.

“Qué carácter tan audaz”, dijo Quinton con una sonrisa.

Su sonrisa era tan encantadora que fácilmente podría encantar a todos los vivos.

El gordo, Miles, fue el primero en enfurecerse.

“¡Tonterías!”.

“¡Tom, él me está faltando el respeto!”.

“Señorita Schick, déjamelo a mí”.