El Amor Eterno romance Capítulo 195

Joshua, con su tono presumido, estaba tan determinado de que yo fuera capaz de salvar a Zachary. Sin embargo, no tenía ni la menor idea de qué le pasaba a Zachary en lo absoluto. Además, ¿qué posible peligro podría enfrentar Zachary en la casa de los Schick?

¿¡Por qué tenía que ser salvado de su propia familia!?

Tenía curiosidad y pregunté, “¿Por qué soy la única que puede salvarlo?”.

“Porque él solo te escucha a ti”.

¿¡Qué él me escuchara significaría que yo debía salvarlo!?

¿Por qué no entendía lo que él estaba intentando decir?

Quizás él sabía que yo estaba confundida, así que Joshua me explicó, “Los Schick le pedirán a Segundo Hermano que se quede porque ellos saben que él estaría dispuesto a eso, pero si tú le pides que los abandone y venga contigo… él definitivamente ira contra ellos y vendrá junto a ti”.

Hizo una pausa y continuó diciendo: "Cuando lo haga, no sufrirá más".

Entonces, le pregunté a Joshua, aún sintiéndome confundida y desconcertada: “¿Por qué es tan aterrorizante que Zachary regrese con los Schick? ¿Qué le pueden hacer los Schick a él?”.

Joshua parecía saber algo, pero no lo explicó claramente. Él dijo brevemente, “Cada vez que él regresa de los Schick, su cuerpo está cubierto de moretones y heridas. ¡No sé por lo que pasa, pero definitivamente no es algo placentero! Bel, Segundo Hermano nunca ha mostrado ninguna emoción. A él nunca le importó nadie. Pensé que él sería así por el resto de su vida, hasta que te conoció, vi un destello de esperanza”.

Agarré mi teléfono fuerte y dije, “¿Qué esperanza?”.

“Él tiene la habilidad de amar a alguien”.

“¿Quieres decir que Zachary… me ama?”.

Joshua habló por el teléfono con un tono de confianza, “Sí, no estoy seguro si te ama, o se preocupa por ti, o si te ve como familia, pero de lo que estoy seguro es que tú le importas. O sino, él no hubiera gastado sus energías en siempre estar a tu lado”.

Recordé a Zachary diciendo que simplemente había sido meramente por la familia.

Apreté los labios y dije, “lo intentaré”.

Le colgué a Joshua y llamé a Zachary. No me atreví a garantizar que Zachary contestaría el teléfono. Me sentí muy perturbada.

El teléfono continuó sonando y justo cuando estaba a punto de colgar, su voz ronca se escuchó, “Bel”.