El Amor Eterno romance Capítulo 1952

Tom le había comprado una medicina para la resaca en la farmacia cercana mientras ella dormía.

Isabelle se sintió mucho mejor después de tomar la medicina, pero igual se quedó sentada en el coche durante mucho tiempo. Se aseguró de estar sobria antes de finalmente salir del coche y seguir a Tom al hotel.

Cedar estaba en la habitación presidencial, en el último piso. Isabelle tomó el ascensor y vio a dos guardaespaldas custodiando la puerta principal.

Ella se acercó y preguntó: “¿Hermano Mayor está adentro?”.

Los guardaespaldas de Cedar sabían que ella era la hija de la familia Schick. por lo que no se atrevieron a ignorarla y respondieron: “Sí. El Señor Yach acaba de entrar a descansar no hace mucho. Señorita, ¿qué quiere hacer? No tenemos la llave de la habitación”.

Isabelle pensó que Cedar estaba enfadado. Por supuesto, tenía todo el derecho de estarlo. Después de todo, ella fue quien lo ignoró.

Ella llamó a la puerta, pero no hubo respuesta desde adentro.

Lo pensó y decidió llamar por teléfono a Cedar.

Cedar no respondió a su llamada, pero la puerta de la habitación se abrió. Isabelle entró y vio a Cedar no muy lejos de la puerta.

Se acercó a él y lo abrazó con ternura.

Ella saludó: “Hermano Mayor”.

Ella lo llamó Hermano Mayor con su dulce voz de manera despreocupada, como si no hubieran estado separados durante dos meses. Sonaba como si ella nunca lo hubiera ignorado; como si nada hubiera pasado.

Cedar se sentía impotente con Isabelle cuando actuaba así.

Cedar se sintió impotente, pero Isabelle ya estaba agotada. Ella lo abrazó y dijo resignadamente: “Hermano Mayor, lo siento. Quedé demasiado cansada ayer después de la competencia, y luego hubo una fiesta de celebración. Ya era tarde para cuando fui a buscarte”.

Cedar no dijo nada en respuesta.

Isabelle preguntó: “Hermano Mayor, ¿estás enojado?”.

Cedar no dijo si estaba enojado o no. En cambio, simplemente caminó hacia el balcón y encendió un cigarrillo.

Isabelle realmente se sentía cansada. Su cansancio provenía de lo más profundo de su corazón, pero no quería que él se preocupara.

Ella se acercó y lo abrazó por la espalda.

“Te extrañaba”, dijo ella.

Cedar finalmente habló y preguntó: “¿Me extrañabas?”.

“Sí. Te extrañé mucho durante los últimos dos meses”, dijo Isabelle.

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