El Amor Eterno romance Capítulo 434

Zachary era un hombre brillante y perspicaz. En el momento en que le hice esas preguntas, él lo entendió. Su mirada se profundizó un poco y preguntó en voz baja: “¿Alguien te dijo algo antes?”.

Sacudí la cabeza y negué: “Simplemente tenía ganas de preguntar”.

Cuando dije eso, Zachary respondió con firmeza: “Cada vez que mientes, tú sacudes tu cabeza y evitas mirarme a los ojos. Bel, ten más confianza y determinación, sin importar los chismes que escuches. No te dejaría sin ningún motivo, ni te dejaré ir por cualquier dificultad”.

¿Por qué de repente me dijo eso?

Pregunté obstinadamente: “Entonces, ¿cuándo me conociste la primera vez?”.

Anteriormente yo hubiera escondido cualquier cosa que escuchara en mi corazón. Lo que sea que haya escuchado de la madre de Zachary, pensaría que es una tontería y me torturaría a mí misma. Sin embargo, con Zachary quería preguntarle de todo para despejar mis dudas.

Zachary sabía que todavía necesitaba una respuesta. Él respondió consideradamente: “Había escuchado tu nombre antes, pero no me lo tomé en serio. No estaba seguro de tu apariencia. La primera vez que te vi fue durante nuestro primer encuentro. Mucho después me enteré que eras la presidenta de Corporación Shaw y exesposa de Dixon. Aunque podría haber descubierto tu identidad antes, no estaba interesado en investigar de ti. Me dijiste que tu nombre era Ysabel Shaw, así que creí que eras Ysabel. En cuanto a la verdad, realmente no me importaba”.

Él dijo que nuestra primera reunión fue en la casa de alojamiento. Yo le creí.

Con tal de que él lo dijera, le creería.

Además, Zachary actuó con normalidad durante ese tiempo. Incluso pensó que me faltaba dinero y me preguntó si lo necesitaba. Si él ya supiera de mi identidad en ese entonces, no habría hecho preguntas tan tontas.

Nuestro encuentro no fue planeado, ni por ninguna otra razón.

Zachary me permitió acercarme a él solo porque yo era Ysabel.

No por ese riñón que provocó tantos malentendidos…

Pregunté suavemente: “En ese momento, ¿por qué me dejaste acercarme a ti?”.

¿Por qué de repente anunció que se convertiría en mi segundo hermano y que me protegería de por vida?

Había tantas otras mujeres en el mundo, pero ¿por qué yo?