El Amor Eterno romance Capítulo 634

Como era de esperar, Zachary nunca me respondió. Incliné la cabeza y lo miré desde abajo.

Le dije con una crítica: “Te equivocaste por la tarde”.

Él se sorprendió por mi confrontación: “¿Mm?”.

“Estoy relacionado con ellos, como amigos. Ellos me invitaron al crucero porque era una conocida. Yo era una conexión digna para ellos. ¡No fue por ti!

“Zachary, ¿verdad? ¿Pensaste que me gustabas, y que por eso seguía apareciendo a tu lado? Sin embargo, ¿alguna vez pensaste en lo que me gustaba de ti? ¿Solo porque tú ocupaste a mi familia Schick durante muchos años?”.

Mis duras palabras fueron un poco desgarradoras e hicieron que la cara de Zachary se volviera más fría.

Abrí mis brazos y me burlé: “¿No podrías estar demasiado acomplejado? Quizás eres tú quien me quiere, pero no te atreves a admitirlo. Por eso me evitaste y no permitiste que apareciera frente a ti”.

“¿Tienes miedo de enamorarte de mí?”.

Con cada palabra que decía, el rostro de Zachary se volvía cada vez más sombrío. Como era el momento adecuado, cambié ingeniosamente la dirección del tema.

“Por supuesto. No soy tú. Por lo tanto, no puedo adivinar lo que estás pensando. Olvídalo. Soy demasiado vaga para ganar la discusión”.

Él directamente me reprendió con voz fría: “Tonterías”.

Sonreí: “Entonces, no me prestes demasiada atención, ¿de acuerdo?”.

Zachary se dio la vuelta y se fue de inmediato. Sonreí y terminé riendo. Me murmuré a mí misma.

“Todavía es débil ante mis provocaciones. Zachary, ¿cómo conseguiste resistir a las mujeres con esa personalidad tuya? ¡Quizás tuve demasiada suerte de tenerte!”.

Zachary. Oh, Zachary. Te amo, Zachary. Te amé tanto que te convertiste en mi fe. Te escucharía y caminaría por este camino con firmeza. No importa cómo me tratas con tu mirada fría y tu entrecejo severo, estaría bien. Después de todo, los recordaría por ti. ¡Tendrás muchas cosas que devolverme en el futuro!

Yara estuvo en su llamada durante unos minutos. Cuando regresó, me burlé de ella: “Hablaste con tu esposo durante tanto tiempo. ¿Qué tipo de dulce charla te tomó tanto tiempo? Mira tu cara sonriente. ¡Finalmente terminaste en la madriguera del conejo!”.

Yara sonrió y me preguntó: “¿Es amor si estoy en la madriguera del conejo?”.

Le pregunté a cambio: “¿Qué más?”.

“Bien, basta. No te burles de mí. Ya no es temprano. ¿Entramos? ¡Apóyame más tarde!”.

Yara abrazó mis brazos. Me levanté y le recordé: “Estás del lado de Zachary. No importa los problemas que causes, ¡él te cubrirá!”.

“Tú no estas equivocada. Después de todo, ¡están todos ellos aquí!”.

Yara me arrastró al pasillo. En el momento en que entré al pasillo, me quedé aturdida. No solo invitaron a Zachary, Charles, Joshua, Eason, Mona y el resto, sino que también hubo otras personas que no reconocía. No solo eso, ¡invitaron a Dixon!

Charles levantó la cabeza de repente: “¿Qué dijiste?”.

Su rostro estaba claramente en estado de conmoción. Me senté tranquilamente al lado de Dixon y me negué a decir nada más. Charles se levantó y trató de indagar más: “Caroline, ¿qué Sra. Ai? Summer… Ella…”.

Inicialmente no quise revelarlo. Sin embargo, dije eso como un impulso de un momento. ¡De alguna manera, eso era para vengar a Summer!

La expresión de Charles se volvió más oscura. Justo cuando él estaba a punto de perder su temperamento. Mia tiró de su brazo. Luego, Charles dejó a Mia sola y rápidamente salió del pasillo. ¡Ella se sorprendió mientras lo perseguía!

Después de que los dos se fueron, el viejo amo Hull finalmente habló: “¿Por qué estás aquí? Yo nunca te invité. ¿Podría ser que extrañas a Dixon? Ahora es solo un retrasado. ¡Nadie puede intimidarlo!”.

Fruncí el ceño. “¿Qué dijo?”.

¡Se atrevió a decir que Dixon era un retrasado!

Dixon se sentó en su asiento en silencio con un rostro confundido. Era como si no estuviera seguro de por qué estaba allí. Bajaba la cabeza todo el tiempo como si su entorno no tuviera nada que ver con él.

Quizás, ¡él ni siquiera se dio cuenta de que yo estaba ahí!

El viejo amo Hull esbozó una sonrisa misteriosa pero no dijo nada. A decir verdad, él no necesitaba decir nada más. Todos sabíamos que Dixon se enfermó mentalmente. Sin embargo, ¡no pude soportar que otros simplemente lo humillaran en público!