El Amor Eterno romance Capítulo 937

Volví a la habitación para encontrar a Zachary, pero él ya no estaba en su ordenador portátil. Me acerqué y lo vi trabajando en los documentos de trabajo de su empresa.

Al ver que le miraba fijamente, me explicó con paciencia: "Cuando estoy libre, suelo revisar los informes de mi empresa. ¿Qué hay de ti? ¿Vas a salir con Yara?".

"Mjm. Tenemos una amiga que acaba de regresar a Ciudad Wu", le dije a Zachary.

Zachary urgió: “Cuídate en el camino”.

Me incliné y le besé la mejilla con cariño. Sus labios se curvaron en una sonrisa y se burló de mí de repente.

“Parece que estás muy pegajosa últimamente”.

Entrecerré mis ojos y sonreí: “¿No te gusta, segundo hermano?”.

Zachary nunca respondió a mi pregunta. Continué preguntando: “¿No te gusta?”.

Como insistí, Zachary solo respondió con un suave ‘mjm’.

“¿Te gusta o no te gusta?”.

Zachary suspiró. “Tan habladora”.

Dije con timidez: “Segundo hermano, respóndeme”.

“Me gusta”, admitió él.

Finalmente, quedé satisfecha con su respuesta y salí de la habitación. Cuando abrí la puerta, vi que Yara estaba escuchando a escondidas. Fruncí el ceño y le pregunté: "¿Qué estás haciendo?".

“Tch, tch”. Ella comentó: “Eres tan exagerada”.

Me quedé sin palabras.

Estiré los brazos y le di una palmadita en la cabeza: "¿Por qué quieres espiar la intimidad de los demás? Además, a los hombres les gustan este tipo de mujeres".

Yara agitó las manos: “No te soporto”.

“Entonces no actúes como una bebé con Lance", la molesté.