El Arrepentimiento Llega Tarde romance Capítulo 39

Lorena sonrió levemente, recostándose hacia atrás.

—¿Preocuparme por qué? He estado fuera de casa por tanto tiempo y nadie me ha llamado. Ni siquiera sabías que había venido a Valle del Sur, pero pareces bastante buena robándome clientes.

La expresión de Gisela se tornó lastimosa: —No te robé clientes, es solo que mis precios son más bajos y por eso la gente prefiere venir aquí.

Lorena sacó una foto de su celular y la mostró ante la cámara: —Esta es una foto de mi hermana besando a mi prometido. Antes de venir a Valle del Sur, ya había aclarado las cosas con este prometido, así que decir que estoy usando la campaña agrícola para perseguir hombres es absurdo. Mi hermana parece muy interesada en mi prometido, incluso llegando a la cama con él. No solo tengo esta foto de ellos besándose, sino también después de que tuvieron relaciones sexuales. ¿Quieren ver?

Tan pronto como terminó de hablar, el chat explotó.

—¡Vaya! Nunca habíamos visto a una presentadora tan directa.

—La foto pasó tan rápido que no se vio bien la cara, podría ser falsa. Ella solo quiere difamar a su hermana.

—Pero el rostro de su hermana realmente cambió, ahora se ve horrible. La hermana mayor parece tan tranquila, y la menor parece haber revelado sus verdaderas intenciones. Esta vez, yo apoyo a la hermana mayor.

Mientras Lorena observaba el chat enloquecido, no olvidó promocionar sus propias manzanas.

—Vendo las manzanas a 5 dólares por 5 kilos y no espero ningún retorno. Este canal está oficialmente autorizado, si tienen dudas pueden llamar directamente al gobierno local. Este año, debido a las lluvias torrenciales repentinas, hemos perdido muchas manzanas. Solo intento ayudar a los agricultores a recuperar algo de lo perdido. 5 dólares por 5 kilos no es caro, un precio demasiado bajo lastimaría sus sentimientos.

La voz de Lorena siempre transmitía una fuerza tranquilizadora. Aprovechó la oportunidad para sacar otra manzana y la agitó frente a la cámara.

—Además, solo permito que la gente de ciudades cercanas compre. La calidad no se puede garantizar si es demasiado lejos. Si realmente estuviera obteniendo algo a cambio, debería estar feliz cuanto más pedidos reciba, como ustedes vieron el tráfico en el canal anoche. Si todos compraran, mi tarea ya estaría completada.

Las personas que aún la criticaban de repente se dieron cuenta de algo. Sí, si realmente estuviera obteniendo un beneficio, debería estar más contenta cuanto más gente ordene.

Pero Lorena había estado evitando que la gente de áreas lejanas comprara anoche.

Por otro lado, Gisela no limitaba las áreas, parecía estar alentando a todos a ordenar.

Gisela, frente a la cámara, parecía molesta pero ajustó su expresión rápidamente.

—Hermana, no sé por qué tienes que difamarme así. ¿Es porque nuestros padres no te han llamado? Pero ellos todavía están enojados contigo, he estado mediando entre ustedes todo este tiempo.

Mientras hablaba, comenzó a llorar.

Lorena tomó un sorbo de agua, completamente inafectada por la lástima de Gisela: —Ese prometido mío no es muy inteligente. Para forzarme a romper el compromiso, él mismo me envió un video de ustedes teniendo sexo. Si sigues llorando, transmitiré ese video en vivo ahora mismo.

El llanto de Gisela se detuvo de inmediato, su rostro se tornó pálido y tenso.

Pronto, la cantidad de pedidos comenzó a aumentar exponencialmente, mientras que el tráfico en el canal de Gisela cayó instantáneamente.

Gisela, forzando a mantenerse en el aire, tenía un aspecto extremadamente incómodo. No sabía qué decir y temía que Lorena realmente tuviera pruebas de su punto débil.

Mientras dudaba, alguien en su canal envió muchos regalos virtuales, cada regalo virtual valía mil dólares, y rápidamente se enviaron diez.

Gisela se sorprendió, luego sonrió: —Gracias por tu apoyo.

El nombre de quien gastaba dinero se volvía dorado y sus comentarios eran muy visibles para todos.

El apodo era "Solo quiero a la segunda hermana", claramente era Juan.

[Segunda hermana, no llores, te he enviado regalos virtuales.]

Gisela sonrió, una sombra de triunfo cruzó sus ojos. Lorena siempre había cuidado mucho a este hermano menor, ver a Juan tratándola de manera tan injusta seguramente la haría sentir terrible.

Miró hacia el canal de Lorena, pero ella seguía promocionando sus manzanas como si no hubiera visto a Juan.