El Ascenso de la Luna Fea romance Capítulo 337

Lyra entró en la casa y encontró a Jagger allí en la sala de estar, comiendo algunas manzanas. Tenía un cuchillo con el que cortaba la manzana antes de llevarla a su boca. Parecía tan feliz, mientras ella estaba allí, de luto.

“Lyra.” Él llamó, con la boca llena de un trozo de manzana. “No me dijiste que venías.”

Los ojos de Lyra estaban irritados y hinchados. Fijó su mirada en él mientras dejaba su bolso en la mesa de la entrada de la habitación.

“¿Cómo lo haces?” Preguntó en un tono bajo. “¿Cómo logras mantenerte tan feliz cuando nuestro plan más grande se vino abajo hace una semana? Ni siquiera te molestaste en consolarme, ni parecías preocupado por haber perdido mucho dinero. Ni siquiera intentaste proponer una alternativa o algo así. Es tan diferente… a ti.”

Jagger se burló. Cortó un trozo de manzana y lo lanzó a su boca antes de mirarla.

“¿Dijiste una alternativa? ¿Qué se suponía que debía hacer? ¿Apuntarles con una pistola a los Kensingtons y amenazarlos para que transfirieran su riqueza a mí? ¿Realmente crees que eso funcionaría?”

El sarcasmo en su voz mató a Lyra. ¿Cómo se atrevía a burlarse de la situación?

Dio dos pasos hacia él. “Este no es el tú que conozco. ¿Por qué estás tan indiferente al respecto?”

Los labios de Jagger se curvaron en una sonrisa. “¿Y por qué estás tan desesperada? ¿Estás aquí para huir a Alemania con todo el dinero que se suponía que íbamos a compartir?”

En ese momento, el corazón de Lyra se le salió del pecho. Sus ojos se dilataron de shock, y sus dedos se entumecieron.

Lo miró con tanto terror, como si le hubieran arrancado el corazón del pecho.

Jagger se rió de la sorpresa en su rostro.

“¿Estás sorprendida?” Se burló. “¿Estás tan sorprendida de que lo sepa? ¿De tus planes de traicionar a tu hermano y a mí y huir con el dinero? Lo sabía todo, Lyra, incluyendo el hecho de que tu visa ya estaba disponible.”

Un gran nudo le apretó la garganta a Lyra, luchó por respirar.

“¡Perra traicionera!” Jagger se levantó. Ahora, sus ojos brillaban.

“Trabajé tan duro para esto. ¡Fue mi idea desde el principio! ¿Y aún así pensaste en traicionarme? ¿En traicionar a esta familia?”

Lyra levantó su mirada llorosa para encontrarse con la suya. Por un momento, la contrición se instaló en su corazón. No tenía idea de que él había descubierto sus planes. ¿Cómo se enteró?

“¿Dijiste familia?” Se burló. Sí, se sentía culpable. Pero aún se sentía ofendida por sus palabras.

“¿Cuándo fuimos alguna vez una familia? Cuando crecí, apenas te conocía. ¡Nos abandonaste a mamá y a mí y nos dejaste sufrir! Pero cuando finalmente tuviste uso para mí, cuando querías que me casara con un hombre mayor, me buscaste y me usaste. ¡Nunca me viste como una hija, sino como un objeto de negocios! ¡Nunca fuiste un padre para mí!”

Los puños de Jagger se cerraron. Sus ojos chispearon, y le costó mucho controlarse para no ponerle las manos encima.