A la velocidad que mi cuerpo y mi mente tomados por sorpresa me permitieron, me abracé a Alexander por detrás y conseguí sin mucho esfuerzo separarlo de su hermano, lo que significaba que no pensaba iniciar una pelea, sino simplemente propinarle un puñetazo para calmar sus ganas o demostrar algún tipo de punto que se escapaba de mi comprensión.
Se safó de mi agarre y me hizo un gesto que indicaba que ya estaba calmado y no seguiría en su conducta pasivo-agresiva.
Había pasado de la calma a la ira en un mismo minuto. Y vuelta a empezar.
—He estado reflexionando —empezó a decir mientras su hermano se enderzaba la mandíbula y acomodaba su postura sobre un brazo de la silla que más cerca le quedaba —si es que en este estado se pude reflexionar, y sigo sin entender que mal le pudo haber hecho un niño al mundo, para que se ensañara con él, durante toda su puta vida —había cierta amargura en sus palabras y mis lagrimas empezaban a amenazar al borde de mis ojos —toda mi maldita familia me destruye. Nadie más que joss ha estado ahí para mí, y que tú, justamente un hombre que se debe regir por la ley,me haga esto, ya es de pena la verdad. No consigo entender uno solo de los movimientos que hacen ustedes.
Yo me senté una vez más en el borde de su escritorio y él se acercó a su hermano y se agachó un poco delante de él, apoyándose en el respaldo de la silla donde se había acomodado y le dijo, mientras el otro mantenía silencio...
—¿Planeas dejar de odiarme algún dia?, ...¿o voy a tener que vivir siempre esperando los puñales de tu parte?
Su hermano lo miraba compungido y me daba la impresión de que le dolían muchísimo las palabras que Alexander le decía.
Ambos estaban sufriendo aquella conversación a su propia manera,pero era más que evidente que ninguno de los dos estaba ajeno al dolor que esas palabras clavaba en ellos, de formas distintas.
—Entiendo que quizás sea desmesurado el hecho de que pretenda que por ser tu hermano, no denunciaras algo como esto —concordó Alexander y Kyle permanecía mirándolo a los ojos —pero de ahí, a enviarnos copias para crear tensión y pánico en nosotros, es demasiado vil,incluso para tí.
Lo primero que Basic nos había aconsejado, ya se había ido por el caño, pues quedaba más que claro que con aquella conducta,Alexander habían puesto sobreaviso a su hermano, que era justo lo que teníamos que evitar, pero por primera vez en el tiempo que llevaba a su lado, el había perdido la concentración en sus ideas.
—¿Cuál es el precio de tu silencio Kyle?,¿Qué hace falta para comprar tu colaboración?...
En ese justo momento lo había visto entrando nuevamente en el modo comprador y como la primera vez que lo había visto así, daba miedo.
Su postura de piernas abiertas,hombros rectos y muslos estiradas en perfecta línea con ellos, las manos en los bolsillos y el mentón alzado, lo hacían lucir peligroso y que nada ni nadie lo separaría de su objetivo... Comprar.
—¡Basta Alex! —Kyle le exigió de manera calmada —no soy una de tus chicas y los sabes muy bien —esa frase me dolió, bajé la vista y me habría ido si no fuera tan importante lo que allí se trataba —si fuera a denunciarte las patrullas estarían abajo y no les habría mandado esos videos. Me conoces lo suficiente para saber que no falto a mi trabajo, soy un policía correcto y estás más que seguro. Así como sabes, que si no he denunciado tus perversiones extralimitadas, es porque eres mi hermano y trato de ayudarte. Lo sabes y no intentes negarlo.
—Entonces sorpréndeme con tu justificación para habernos enviado esos videos sin intenciones ocultas.
Alexander había hecho, la misma p re gusta que rondaba mi mente desde que este asunto había salido a la luz.
Se suponía que era un policía, que no debía faltar a la ley. Si no quisiera nada a cambio, ya habría denunciado que es lo que corresponde hacer en esos casos...¿Cuál era su justificación entonces?
—Quería hacerte un poco de chantaje Alex y algo más —nos miramos entre todos y sabíamos que seguíamos esperando más de su respuesta, aquello no decía nada en realidad — quiero que vayas a ver a papá. Y que dejes ir a Loreine de tu vida. Es simple.
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