Resumo do capítulo Capítulo 165 do livro El romance del dulce remolino: Señor, ¿le gustaría ser mi pareja en el matrimonio? de Internet
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Xiaoxiao no le tenía miedo a nada, lo que la hacía parecerse un poco a Lu Shengyao.
Lo que ella dijo no era incorrecto. Donde estaban ahora, realmente no había nadie que se atrevería a echarla de allí.
Los clientes de este lugar eran en su mayoría personas importantes. Si los camareros fueran tan inconscientes como para ofender a uno de ellos, podrían traer la perdición sobre ellos mismos.
Además, la familia de Xiaoxiao poseía un gran número de acciones del Rascacielos de la Dinastía Real.
"Está bien, ya que ese es el caso, sacrificaré mi vida para acompañarte".
El trío hizo un brindis y hablaron felizmente. El ambiente relajante era el mismo que había sido muchos años atrás; trayéndoles la alegría que experimentaron cuando estudiaron en la misma universidad, cuando se quedaron en el mismo dormitorio y cuando jugaron como locas.
Después de aproximadamente una hora de estar bebiendo, Tang Ruochu ya no pudo beber más. Xiaoxiao y Song Anyi todavía estaban muy emocionadas. Se reunieron para jugar a beber hasta el fondo.
Tang Ruochu se sentó a un lado y observó. La sonrisa en sus labios era la más vibrante que había tenido en los últimos meses.
A mitad del juego, Tang Ruochu fue al baño. Su estómago estaba reaccionando con demasiada intensidad. Se arrodilló junto a la taza del inodoro y vomitó por un rato.
Después de un tiempo, su estómago finalmente se sintió mejor. Se lavó la cara y luego arrastró sus pies flotantes de regreso.
Sin embargo, mientras ella estaba en el pasillo, vio a dos personas a las que no esperaba ver.
Qin Manni y un hombre de mediana edad.
Qin Manni envolvió íntimamente su brazo alrededor del brazo del hombre. Ambos caminaron juntos y hablaron felizmente. Mientras hablaban, Tang Ruochu aún podía ver a Qin Manni emitiendo una expresión tímida de vez en cuando.
Tang Ruochu levantó sus cejas incontrolablemente. Ella sabía quién era ese hombre.
Originalmente, todo iba de acuerdo al plan. Mientras él estuviese satisfecho con su servicio, este hombre, que tenía innumerables cantidades de dinero, estaría dispuesto a pagar por ella e incluso a recuperar los contratos de patrocinio que había perdido.
Sin embargo, en este momento crucial, ella no esperaba encontrarse con Tang Ruochu.
Ella era una celebridad y también una amante. Esta identidad no podía salir a la luz. Si los periodistas se enteraban, ella estaría completamente arruinada.
Qin Manni de repente se asustó un poco.
Ella no quería convertirse en una segunda Gu Ruoruo.
Justo cuando la expresión facial de Qin Manni mostraba que estaba en pánico, Tang Ruochu la miró con una aparente sonrisa, luego suspiró y negó con la cabeza. Ella no dijo nada y pasó junto a los dos, planeando simplemente irse.
Cuando vio los ojos de Tang Ruochu, el corazón de Qin Manni saltó a su garganta. Ella no pudo evitar gritar. "Tang Ruochu, ¡detente ahí mismo!"
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