El romance del dulce remolino: Señor, ¿le gustaría ser mi pareja en el matrimonio? romance Capítulo 197

Tang Ruochu sintió una ligera sensación de calor en su corazón. Ayudó al anciano a sentarse a un lado. Luego, terminó el desayuno que le trajo.

Durante este período de tiempo, el Tío Zhao también conversó con Lu Shijin por un rato. El anciano parecía estar muy complacido con este nuevo yerno.

Lu Shijin era elegante en su comportamiento y palabras, y su conducta era buena. No mostró ningún signo de despreciar al Tío Zhao solo porque era simplemente un mayordomo.

Al contrario, era muy respetuoso.

Debido a esto, el Tío Zhao se dio cuenta de que este yerno era mucho mejor que Ji Yinfeng.

En el pasado, Ji Yinfeng le ordenaba como un sirviente cuando lo veía. Mientras tanto, Lu Shijin lo trató con modales. Basándonos solo en esto, no se pueden comparar los dos.

Después de un tiempo, Tang Ruochu terminó su desayuno. Volvió a armar la lonchera y se la devolvió al Tío Zhao. "Tío Zhao, tendré que molestarlo para que se ocupe de los asuntos de casa. En cuanto a las cosas del hospital, déjemelas a mí".

"Sí Señorita".

El Tío Zhao asintió y se dio la vuelta para irse. Sin embargo, parecía haber pensado de repente en algo. Dijo con vacilación: "Por cierto, Señorita, todavía hay una cosa más...".

Al ver que el anciano tartamudeaba, Tang Ruochu rápidamente sonrió y le dijo: "Tío Zhao, puedes decírmelo".

Sintiéndose incómodo, el Tío Zhao se frotó los bolsillos con las manos. Después de un rato, pareció haber tomado una decisión firme y luego sacó algo de su bolsillo. El Tío Zhao abrió lentamente la palma de la mano ante ella y le preguntó con cautela, "Señorita, ¿sabe qué es esto?".

Tang Ruochu miró los artículos. Había dos pequeñas botellas de vidrio en su palma. Parecían soluciones para inyecciones. Una de las botellas estaba abierta y obviamente usada. La otra aún no se había abierto.

Tang Ruochu no pudo evitar detenerse por un momento. Los agarró y miró más de cerca. No parecía haber nada especial en ellos. Preguntó dubitativa: "Tío Zhao, ¿hay algún problema? ¿De dónde sacaste esto?".

"Esto, esto...".

El Tío Zhao parecía estar a punto de decir algo, pero se detuvo. Sentía como si tuviera miedo de que pudiera causar un gran problema.