El romance del dulce remolino: Señor, ¿le gustaría ser mi pareja en el matrimonio? romance Capítulo 327

Cuando Ji Yinfeng llevó a Gu Ruoruo a casa, sus padres aún no se habían acostado. Cuando vieron a la mujer desaliñada junto a su hijo, se sorprendieron mucho.

Qin Silian se cubrió la nariz y se quejó con una expresión de disgusto en su rostro, "Yingfeng, ¿por qué trajiste a esa persona a casa? Nuestra familia no es una organización de caridad."

Obviamente, ella no reconoció quién era la persona.

"Tía, soy Ruoruo."

Cuando Gu Ruoruo vio que Qin Silian no la reconoció, rápidamente habló por sí misma.

"¿Ruoruo?"

Qin Silian y Ji Yunze intercambiaron miradas antes de mirar a su hijo para buscar confirmación.

"Sí, ella es Ruoruo."

Ji Yinfeng asintió con su cabeza.

"¡Oh dios mío!" Qin Silian gritó con incredulidad.

¿Cómo es posible que una persona tan hermosa se haya vuelto peor que un mendigo?

"¿Qué diablos pasó?" Ji Yunze cuestionó con severidad.

"Tío, todo es culpa de Tang Ruochu. Tienes que defenderme."

Tan pronto como se mencionó el nombre "Tang Ruochu", Gu Ruoruo apretó sus dientes con odio. Su rostro ya golpeado se torció aún más ferozmente debido al odio.

Ji Yunze y Qin Silian se sorprendieron y rápidamente dieron unos pasos hacia atrás.

Al ver eso, Ji Yinfeng frunció el ceño y les dijo, "Papá, Mamá, llevaré a Ruoruo arriba para que se limpie primero. Hablaremos más tarde."

"Ve, ve rápido." Ji Yunze agitó su mano, esperando que se fueran lo antes posible. El olor era tan fuerte que estaba a punto de vomitar.

Después de encontrar a su padre en el comedor, se acercó y sacó una silla para sentarse junto a él.

"¿Qué pasa?" La mirada de su padre pasó del periódico a ella. Al ver su rostro hinchado y enojado, él no pudo evitar reír. "¿Quién volvió a enojar a mi bebé?"

"Todo es por tus subordinados," le respondió Ying Xiaoxiao enojadamente.

"Hay muchos de ellos, ¿de cuál estás hablando?"

"Es el Jefe de la estación de policía."

"Oh, él." Su padre comprendió de repente lo que estaba pasando y asintió con su cabeza. Luego le preguntó, "¿Qué sucede con él?"

"Él..." Ying Xiaoxiao estaba a punto de decirle lo que había hecho el Jefe, pero al mirar la mirada amorosa de su padre, se tragó las palabras y le dijo en tono avergonzado. "Nada."

Ella era su hija. Como su padre, ¿cómo podía él no saber cuán conflictiva se sentía ella?