El romance del dulce remolino: Señor, ¿le gustaría ser mi pareja en el matrimonio? romance Capítulo 362

"¿Oh?". Shen Mofei levantó las cejas, y un toque de burla brilló en sus ojos. "Creo que le tienes miedo a Ying Xiaoxiao, ¿verdad?".

"¿Tenerle miedo a ella?". Lu Shengyao se agitó. "¡No le tengo miedo! Simplemente no le quiero traer problemas a mi cuñada, ¿entiendes?".

Al ver que Lu Shengyao estaba tan ansioso por explicarse que sus ojos se abrían de par en par, las esquinas de los ojos de Shen Mofei se crisparon, y rápidamente lo consoló: "Está bien, está bien, lo entiendo".

"Así está mejor". Lu Shengyao asintió con satisfacción.

Su reacción era exactamente la de alguien cuyos puntos doloridos estaban siendo pinchados y, sin embargo, él aún no le creía.

Shen Mofei suspiró suavemente en su corazón. Como era de esperar, el coeficiente intelectual de un hombre bajaba cuando conocía a una mujer.

Él no era una excepción.

Al pensar en la mujer que lo había rechazado sin piedad, sintió un dolor sordo en su corazón.

Luego, cuando vio el patético estado actual de Lu Shengyao, no pudo evitar sentir una sensación de desolación, como si hubiera caído presa del mismo destino que Lu Shengyao.

"Primo, no visitemos a la cuñada esta noche. Te invitaré a beber".

Al escuchar eso, Lu Shengyao lo miró, y sus ojos estaban llenos de incredulidad. "¿Salió el sol por el oeste esta mañana?".

Eso se debía a que su primo siempre había tenido mala salud desde que era niño. Además de eso, su abuelo era estricto, por lo que rara vez tenía la oportunidad de tocar el alcohol y, por lo tanto, tenía poca tolerancia. ¿Estaba bromeando sobre invitarlo a beber?

¿Cómo podía Shen Mofei no saber lo que estaba pensando? Inmediatamente dijo: "¿Qué? ¿Quieres ir? Es una oportunidad única".

"Sí, ¿por qué no?". Lu Shengyao no quería perder una oportunidad tan buena, pero...

"¿Por qué de repente ya no quisiste visitar a la cuñada?". Lu Shengyao tenía mucha curiosidad.

Por supuesto que era porque no quería encontrarse con Song Anyi.

Sin embargo, no podía decírselo, así que sonrió y le respondió: "¡Te hago compañía! Si no, te aburrirás también".

Tang Ruochu fue dada de alta del hospital.

Lu Shijin voluntariamente sacó un tiempo para irla a buscar.

"¿Has empacado todo?". Lu Shijin vio a Mu Ling llevando una bolsa de equipaje y le preguntó.

"Sí, la Señora los ha empacado ella misma", respondió Mu Ling respetuosamente.

Al escuchar eso, Lu Shijin frunció el ceño y miró a Tang Ruochu, que se acercaba. "¿No te dije que hicieras que Mu Ling empacara? ¿Por qué lo hiciste tú misma?".

Tang Ruochu miró a Mu Ling y sonrió. "No es conveniente que un hombre lo haga, es mejor si lo hago yo misma".

Al escuchar eso, Lu Shijin se dio cuenta del problema. Un rastro de vergüenza coloreó incontrolablemente su atractivo rostro. "No lo pensé bien".

Tang Ruochu sonrió, caminó hacia él y lo tomó del brazo. Ella inclinó la cabeza para mirarlo y le dijo alegremente: "¡Vamos a casa! ¡Nos vamos a casa!".