Resumo de Capítulo 369 – Capítulo essencial de El romance del dulce remolino: Señor, ¿le gustaría ser mi pareja en el matrimonio? por Internet
O capítulo Capítulo 369 é um dos momentos mais intensos da obra El romance del dulce remolino: Señor, ¿le gustaría ser mi pareja en el matrimonio?, escrita por Internet. Com elementos marcantes do gênero Romance, esta parte da história revela conflitos profundos, revelações impactantes e mudanças decisivas nos personagens. Uma leitura imperdível para quem acompanha a trama.
El cambio de tono de Zhao Xiaowan sorprendió a Tang Ruochu antes de que sus labios se curvaran en una sonrisa burlona.
"¿Necesito tu permiso para enviar a mi padre a los Estados Unidos? Por favor, deja de interferir en los asuntos de mi familia".
"Chuchu, ¿cómo puedes...?".
"Por favor, lárgate. Quiero acompañar a mi padre sola". Tang Ruochu la interrumpió sin piedad.
Mientras hablaba, se dio la vuelta e ignoró a su madrastra.
Zhao Xiaowan nunca había querido quedarse. Ella miró maliciosamente a Tang Ruochu antes de irse apresuradamente.
Tenía que contarle a Ruoruo sobre el plan de enviar a Tang Song a Estados Unidos. Entonces, podrían estar preparadas para manejar los eventos futuros.
Después de que Zhao Xiaowan se fue, Tang Ruochu agarró las cálidas manos de su padre y le susurró: "Papá, me aseguraré de que aquellos que te lastimaron sean debidamente castigados. Protegeré al Grupo Tang y te lo devolveré una vez que te recuperes".
Después de que terminó de hablar, se quedó mirando fijamente el pálido rostro de su padre y observó sus ojos cerrados. Sintió una amargura en su corazón mientras murmuraba con la cabeza baja: "Papá, tienes que recuperarte pronto".
La sala se quedó en silencio una vez más con solo los pitidos de las máquinas. Tang Ruochu se sentó tranquilamente junto a la cama, apretando con fuerza la mano de su padre. Detrás de ella, un viento travieso entró y levantó las cortinas juguetonamente.
Podemos perdonar a alguien que comete un error por primera vez.
Pero ¿y la segunda vez?
"Lo siento, se ha equivocado de número". No dijo mucho antes de colgar.
Antes de que pudiera dejar su celular, había sonado de nuevo. Esta vez, era de Shen Mofei.
Ella contestó la llamada. "Te dije que no conozco a este borracho. Deja de llamarme".
"Anyi...". La familiar voz profunda vino desde el otro extremo del celular. Al escuchar la voz, ella se mordió los labios y apretó el celular con más fuerza.
"Anyi, ¿por qué... eh... me tratas como a un extraño? Yo... realmente... te amo".
Él no podía hablar con frases completas porque estaba muy intoxicado.
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