Resumo do capítulo Capítulo 387 de El romance del dulce remolino: Señor, ¿le gustaría ser mi pareja en el matrimonio?
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"Algunos sabores no tendrán el mismo sabor, sin importar cuán similares o deliciosos sean, si no los hace la misma persona. Tendrán un sabor insípido".
Esta fue la explicación que le dio Shijin para disipar sus dudas.
"Pero es diferente cuando lo haces tú".
Al mismo tiempo, también admitió que ella era especial.
Porque la amaba, también amaba todo sobre ella.
Recientemente, circularon rumores por todas partes sobre el Grupo Tang. Sus empleados estaban discutiendo quién sería el nuevo Presidente del Grupo Tang.
Algunos dijeron que Gu Ruoruo probablemente sería la presidenta, ya que ella tenía la mayor cantidad de acciones.
Otros afirmaban que Tang Ruochu estaba comprando en secreto acciones de otros accionistas, tratando de hacer un gran regreso en la junta de accionistas.
Pero la mayoría de los empleados aún preferían que Tang Ruochu fuera la heredera de la familia Tang.
En el momento en que el expresidente fue ingresado en el hospital debido a un derrame cerebral, su esposa y Gu Ruoruo habían intervenido abiertamente en los asuntos del grupo. ¡Estaban tan impacientes por apoderarse del Grupo Tang!
¡Su ambición encubierta era un secreto a voces!
Por lo tanto, no era de extrañar por qué la gran mayoría de los empleados estaban del lado de Tang Ruochu. Esperaban con ansias que esta verdadera Señorita Tang asumiera el cargo de Presidenta de la junta de accionistas.
Todos estaban expectantes, pero Tang Ruochu se sentía muy incómoda.
Anteriormente, debido a la lesión en la cara de Gu Ruoruo, la reunión de la junta de accionistas se había pospuesto. Pero tan pronto como se recuperó, inmediatamente propuso celebrar nuevamente la reunión de la junta de accionistas.
Aunque Shijin y los demás ya habían tomado medidas, Tang Ruochu aún temía que pudieran llegar demasiado tarde. Su preparación podría no ser suficiente y podrían perder esta batalla. Si eso sucedía, el Grupo Tang realmente caería en manos de Zhao Xiaowan y su hija.
Pero Tang Ruochu necesitaba su apoyo, así que...
"Abuelo Chen, usted conoce a mi padre desde hace décadas, y su relación siempre ha sido buena. También me aprecia como a una hija. Esta es la crisis más grande que el Grupo Tang ha enfrentado. Realmente necesito su apoyo".
Tang Ruochu estaba afuera, hablándole a través de la puerta.
Durante mucho tiempo, no hubo movimiento en el interior. Tang Ruochu se volvió para mirar a Lu Shengyao a su lado y frunció los labios. Dijo en un tono decepcionado: "Parece que el Viejo Chen realmente no me ayudará".
"Cuñada, ya que no está dispuesto a ayudar, entonces no tenemos que perder el tiempo aquí. Regresemos y pensemos en otra forma".
Tang Ruochu hizo un puchero y suspiró impotente. "Eso es lo único que podemos hacer ahora. Vamos".
Después de que se fueron, la puerta se abrió. Un hombre de mediana edad asomó la cabeza y miró a su alrededor. Cuando no encontró a nadie allí, volvió a cerrar la puerta.
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