El romance del dulce remolino: Señor, ¿le gustaría ser mi pareja en el matrimonio? romance Capítulo 418

Lu Shengyao se quedó sin palabras.

¿Esta mujer mimada había malentendido algo? Ella lo estaba cuestionando como lo haría una novia cuando su novio la había engañado.

Lu Shengyao sentía que no podía permitir que ella continuara con este malentendido. De lo contrario, una cierta persona también lo pensaría mal.

Lu Shengyao frunció el ceño cuando pensaba en esto. ¿Por qué le importaba si ella lo pensaría mal o no?

Él no tenía tiempo de pensar muy a fondo en ello. Al ver que él no decía nada, la mujer mimada se enfadó y trató de desahogarse tirándoles un plato a ellos.

Él reaccionó rápidamente y jaló de Ying Xiaoxiao hacia un lado para esquivarlo.

Pero ese no era el final. Después de arrojar el plato, había tenedores, cuchillos, cucharas, tazas e incluso portavasos volando hacia ellos.

Él y Ying Xiaoxiao se apresuraron a esquivar los misiles. Eventualmente, la mujer mimada se quedó sin nada para tirar y trató de tomar una silla para arrojarla.

Afortunadamente, la silla era demasiado pesada para que ella la moviera.

Ying Xiaoxiao miró el cuchillo que estaba clavado en el piso de madera y su corazón palpitaba con un miedo persistente.

“Oye, Lu Shengyao, ¿qué tipo de cita estás buscando? ¿Por qué su temperamento es tan terrible? ¿Por qué ella es tan irracional?”.

Cuando Ying Xiaoxiao se dio cuenta de que todo esto era culpa de Lu Shengyao, ella le gritó como si hubiera olvidado que ella fue la que había causado la situación.

Antes de que Lu Shengyao pudiera hablar, la mujer mimada corrió hacia ella enojadamente. Ella señaló la nariz de Ying Xiaoxiao y la regañó: “P*rra, ¿quién tiene un temperamento terrible? ¡¿Crees que tienes un buen temperamento, ladrona de novios?! ¡Deberías mirarte en el espejo y ver si eres digna de Shengyao!”.

Al ver esto, la mujer mimada se enojó tanto que dijo de todo. Lo que más les importaba a las mujeres era cuando su belleza y figura perdían frente a las de otra persona, especialmente cuando esa otra persona era una p*rra.

Ying Xiaoxiao volteó su cabeza y la miró. El deleite en su rostro no se podía ocultar. “¿Ves? La persona que a Yao le gusta soy yo. Si aún quieres ahorrarte más vergüenza, deberías irte rápidamente”.

“Tú…”. La mujer mimada apretó los puños con fuerza y ​​la miró con odio.

Ying Xiaoxiao la fulminó con la mirada sin mostrar ningún signo de retroceso. Las dos habían entrado en un callejón sin salida.

Lu Shengyao sentía que tenía que decir algo para que este caos terminara perfectamente.

Él tosió suavemente y le dio a la mujer mimada una sonrisa de disculpa. “Señorita Yang, disculpa que algo así suceda en nuestra cita a ciegas. En realidad…”.

Él colocó su brazo alrededor de la cintura de Ying Xiaoxiao. “Ella es mi novia. Tuvimos un conflicto y solo acepté ir a una cita a ciegas contigo en un ataque de ira”.