El Último Acto del Cisne romance Capítulo 6

6 /240

Almendra escuchaba sus palabras con el ceño fruncido, apretando la mano con fuerza.

Apenas entraron en la casa, Leandro la jaló a un costado, se acercó a su oído y le murmuró en voz baja, con ese tono suave que a veces usaba para convencerla:

—Amor, ¿no te enojaste, verdad? Mi mamá apenas antes de Navidad tuvo la cirugía del corazón, no puede alterarse. Lo tuyo, mejor se lo cuento después, ¿te parece?

Almendra nunca fue alguien que se enganchara en discusiones ni que buscara pelear. Entendía que Leandro tenía un cariño profundo por su madre, que había pasado años sola. Y además, él tampoco sabía cómo era su suegra con ella, esa cara falsa que le mostraba solo cuando él no estaba.

En cuanto a esos comentarios venenosos de su suegra, por Leandro, ella prefería tragárselos y no armar más problemas.

Asintió despacio y murmuró un leve:

—Ajá.

Leandro le apretó la mano, como si quisiera transmitirle fuerzas a través de ese gesto.

—Eso, así me gusta. Nuestra maestra Almendra, tan paciente, tan tranquila, con una clase que nadie más tiene… ¿Cómo te vas a poner al nivel de la abuela?

Almendra lo miró de reojo, con una sonrisa apenas insinuada en los labios.

—No me vengas a echar flores, ¿eh?

—Te lo digo de corazón —replicó él, con una sinceridad que a Almendra le arrancó una risa bajita.

Entre bromas y palabras al aire, los dos se dirigieron a la casa principal para saludar a Rubén.

...

Ya por la tarde, Leandro recibió una llamada que le cambió la expresión y salió de inmediato, con una seriedad que a Almendra le puso los nervios de punta.

Un rato después, al revisar las noticias en tendencia, Almendra se enteró de lo ocurrido: en el proyecto del hotel de Grupo Jasso, uno de los trabajadores intentó suicidarse en la obra por un problema sentimental. Por suerte, un negociador profesional logró evitar la tragedia a tiempo.

El arquitecto de ese hotel era su hermano, Ezequiel Salgado.

Leandro, por su parte, tuvo que dar la cara ante los medios, hacer declaraciones y encargarse de todo el lío, tranquilizando a la gente y protegiendo la imagen de la empresa.