El Valiente Renacer de una Madre Soltera romance Capítulo 56

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Sofía apretó los dientes, deseando poder destrozar a Isidora con sus propias manos.

Pero, de pronto, retrocedió un par de pasos y soltó a su prima. Un cansancio profundo y una sensación de impotencia le llenaron el pecho.

Cerró los ojos, incapaz de reprimir el dolor que la devoraba por dentro.

Su abuelita ya se había ido para siempre.

Además, la mujer frente a ella no valía la pena como para arruinarse la vida por su culpa.

Aún le quedaba Bea. Si terminaba en la cárcel por agresión, Bea se quedaría sola en el mundo.

Isidora tendría que pagar por lo que había hecho.

Pero Bea no podía quedarse sin mamá.

Isidora por fin pudo respirar, se sujetó el cuello y, aún temblando, retrocedió unos pasos para poner distancia con Sofía. Tragaba aire como si nunca hubiera respirado antes, pero aun así, no perdió la oportunidad de lanzar su veneno.

—Sofía, tú nunca debiste haber nacido.

Al escucharla, Sofía soltó una risa amarga.

Solo podía odiar que todo su cariño y su buena voluntad de antes se hubieran ido directo a la basura.

Sofía apartó la mirada, como si estuviera en trance, y regresó hacia la pequeña capilla. Caminaba como una sombra, como si se desvaneciera en el aire, más un fantasma que una persona.

Isidora la observó alejarse, con una expresión extraña en el rostro.

Parecía que Sofía había cambiado mucho...

—¿Y tu hermana? —preguntó Ivana en cuanto Sofía cruzó la puerta de la capilla, su mirada saltándose a la recién llegada para buscar a Isidora detrás.

Sofía frunció los labios y guardó silencio, sin mostrar ninguna emoción mientras se paraba frente a la foto de su abuelita.

Ivana arrugó el entrecejo y la regañó:

—¿Qué clase de actitud es esa?

Pero al verla de pie, tan recta y delgada, Ivana sintió una punzada de desconcierto.

¿Por qué Sofía se veía tan flaca?

Aunque, pensándolo bien, desde que había regresado siempre lucía igual de apagada, como si le hubieran quitado el alma.

Solo estuvo poco más de un año en la cárcel, ¿por qué ese drama?

A decir verdad, Isi siempre había sido mucho más considerada. Comparada con la obstinación y el carácter seco de Sofía, Ivana deseaba que Isi fuera su verdadera hija.